Archivo diario: diciembre 29, 2024

«Parthenope»: Napoli, mia madre

Coproducción entre Italia y Francia, fechada en el año en curso, de 136 minutos de metraje. La escribe, junto a Umberto Contarello, el escritor, guionista y cineasta Paolo Sorrentino, cosecha del 70, con títulos en su haber como «La gran belleza» (2013) o «La juventud» (2015).

La fotografía con excelencia una mujer, Daria D’Antonio y su vibrante banda sonora, plagada de temas musicales, se debe a Lele Marchitelli. El reparto, de lujo, cuenta con Gary Oldman, Silvio Orlando, Luisa Ranieri, Stefanía Sandrelli y la protagonista revelación, que debuta aquí en el cine, Celeste Dalla Porta.

Es una de las elegidas para debatir en la próxima sesión, y primera del año 2025, de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra, que tendrá lugar el MIÉRCOLES, 8 DE ENERO, A LAS 19.30, EN CASA DEL LIBRO VELÁZQUEZ.

Esta firmante ha dudado bastante antes de abordar esta crítica precisamente por el hecho de no condicionar, ni mediatizar, el coloquio sobre ella en nuestra actividad. Ha dudado porque considera, en su opinión personal e intransferible, que el realizador italiano, incluso en ‘La gran belleza’…, está muy sobrevalorado.

Ha dudado porque a los veinte minutos de metraje hubiese querido abandonar la sala y no lo hizo por su compromiso con la tertulia. Así que permaneció en su butaca las casi dos horas restantes, lo que no la hizo modificar su impresión.

Ha dudado porque, aún valorando los méritos fílmicos de factura, de ambición temática y de poderío audiovisual de Sorrentino, no conecta en absoluto con su forma de hacer cine, ni intelectual, ni emocional, ni sensorialmente.

Ha dudado porque esta historia de amor a Nápoles- su ciudad natal, de la que ha comentado: «Si no hubiera nacido en Nápoles, no sería director cinematográfico» – encarnada en una hermosa y enigmática mujer, de belleza subyugante, a la que sigue desde su nacimiento a su jubilación, le ha parecido desmesurada, sobrada de metraje, pretenciosa, excesiva y, a la postre, vacía de contenido.

Ha dudado porque le ha parecido enfática, impostada y ampulosa, marcas de la casa…., manierista y, otra de sus señas de identidad, muy misógina. Ha dudado porque de nuevo los seres pensantes son masculinos, mientras que al personaje central, al que se le supone una gran inteligencia, se la cosifica como objeto de deseo y rendida a los encantos de varones que podrían ser sus padres, como poco.

Ha dudado por muchas consideraciones más, pero las dejará para nuestro próximo encuentro, y primero del 2025, del miércoles, 8 de enero, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez.

Escrito queda.