Los guionistas y directores de cine y televisión estadounidenses Dan Kwan, cosecha del 88, y Daniel Scheinert, cosecha del 87, conocidos popularmente como Daniels, escriben y filman esta su segunda propuesta conjunta, tras ‘Swiss Army Man’ (2016). Una propuesta que, como todo el mundo sabe, ha sido reconocida por, entre otros premios, 2 Globos de Oro y 7 Premios Oscar, incluyendo Mejor Película y Dirección y siendo la gran triunfadora de esta edición.
Quien esto firma debe reconocer que no la vio en su estreno porque tenía muchas más pendientes, y debía registrarlas, al menos la mayoría, en este blog, además de los trabajos de coordinación de la tertulia. Como además, dada la categoría de sus rivales en todas las candidaturas, no pensó que arrasaría como lo hizo y se le quedó inédita. Así que la ha recuperado hace poco.
Antes que nada decir que, aunque se argumentará después y siempre en la personal, subjetiva e intransferible opinión de esta firmante, ‘Todo a la vez en todas partes’ no es, de ninguna manera, superior a ‘Los Fabelman’, ‘Almas en pena de Insiherin’, ‘Sin novedad en el frente’ o ‘Ellas hablan’, por citar sólo algunas, en tanto que Película y Dirección.
Que la composición de Michelle Yeoh aquí como Mejor Actriz, aunque esté muy bien, no es superior a las de Michelle Williams en ‘Los Fabelman’, a la desgarradora de Andrea Riseborough en ‘To Leslie’ ni, desde luego, a la eminente de Cate Blanchett en ‘TAR’.
Que lo mismo podría decirse de la de Ke Huy Quan como Mejor Actor de Reparto, muy solvente, pero para nada superior a las de Brendan Gleeson, sobre todos, él, o Barry Keoghan, por ‘Almas en pena de Inisherin’
En cuanto a la Mejor Actriz de Reparto, una se alegra por Jamie Lee Curtis que lo da todo, pero considera que se ha perpetrado una injusticia con la magnífica Kerry Condon de ‘Almas en pena de Inisherin’
Y tampoco el Mejor Guion Original era superior a los de ‘Almas en pena de Inisherin’ o ‘Los Fabelman’…
Una vez escrito esto, hacer constar también que la historia de la estresada e infatigable inmigrante china en Estados Unidos – dueña de una lavandería, que tiene problemas familiares, que lo lleva todo adelante y con cuentas pendientes con Hacienda, que descubre, merced a una ruptura tridimensional que puede acceder a sus diferentes identidades, y poderes, en bucles infinitos con todos los multiversos posibles, a fin de salvar al mundo de una enemiga poderosa… – le pareció aburrida, insatisfactoria, reiterativa, sobrada de metraje y profundamente conservadora en sus conclusiones finales de las que no hará spoiler.
Esto pese a que no le niega sus osadía, imaginación, desafuero e inventiva a la hora de mezclar géneros como la comedia, la acción, la ciencia ficción, las artes marciales, el drama familiar, el fantástico o los viajes en el tiempo. Ni tampoco el magnífico trabajo de sus equipos de diseñadores de producción y efectos especiales, ni su impecable factura. Pero es que ni siquiera todo ello la interesó, ni la asombró, ni la divirtió…
Producción norteamericana, fechada en 2022, de 139 minutos de metraje. La fotografía muy bien Larkin Seiple y su banda sonora, que subraya con fuerza lo narrado, se debe a la banda de música experimental Son Lux. Del reparto, premios y demás ya se ha escrito.
Tengan en cuenta que ha interesado bastante. Así que deberían verla, aún pueden, y coincidir o discrepar con esta firmante.