Archivo mensual: noviembre 2024

«En cartelera», desde Viva Sevilla a Sevilla Cinéfila: Dos miradas de mujer, dos masculinas y dos prevenciones animalistas

Aquí tienen ya el enlace a la colaboración de esta firmante en Viva Sevilla, que comenta lo más destacado de la oferta de estrenos de este viernes que le queda a noviembre.

Las prevenciones animalistas, que le han surgido a quien esto firma una vez enviada a la revista y tras visionar ambos trailers, surgen precisamente de las dos películas de las realizadoras – una consagrada, otra debutante y ambas propuestas aclamadas por la crítica – en las que las especies no humanas pueden sufrir.

Especialmente en lo que a la de Andrea Arnold se refiere que prefiere esperar a que la vean compañer@s y amig@s de la crítica y le comenten al respecto. Quien esto firma rectificará si y cuando proceda.

Pasen, lean, consulten horarios y sesiones y véanlas teniendo esta circunstancia muy en cuenta. Aviso a navegantes antiespecistas:

https://vivasevilla.es/sevilla/1828855/apetece-ir-al-cine-cuatro-estrenos-para-elegir/

Escrito queda.

No sólo cine, Sevilla #25N: Ni una menos, vivas nos queremos

Tras la concentración solemne de anoche organizada por la plataforma SOMOS ELLAS SEVILLA, silenciosa, a la luz de velas y farolas, con tan sólo un tema feminista que sonó al principio y al final del acto, además de la relación una a una de todas las víctimas…

…Esta tarde del 25-N nos reencontramos en una manifestación numerosa, reivindicativa y vibrante que recorrió el centro histórico desde la Plaza Nueva a la Alameda. Organizada por la Plataforma Ocho de Marzo integrada, con más de 30 colectivos y asociaciones, en el Movimiento Feminista de Sevilla.

Una manifestación que abatió un singular muro grafitero, antes de iniciar la marcha su cabecera, donde se detallaban algunas de las más inicuas violencias contra las mujeres como la explotación, la desigualdad o las violaciones entre ellas.

Una manifestación donde se corearon incesantemente eslóganes tales como: Ni una menos/ vivas nos queremos, La pornografía/ es violación, Aquí estamos/ nosotras no matamos, No son arrebatos/ son asesinatos…

…Mi cuerpo y mi vagina/ni se compran, ni se alquilan, Mujer cuidado/ puedes tener un putero a tu lado, Putero, pagando/ también estás violando, No es no/ lo demás es violación, Ser mujer/ no es un sentimiento…

…El feminismo es/ abolicionista, Más respeto/ por la Agenda Feminista, Mi opresión/ no es tu identidad, Quien ama, no mata/ ni humilla, ni maltrata, No a la violencia/ contra las mujeres, Ni cis, ni terf, ni privilegiada/ ser mujer es vivir explotada, entre un largo e inacabable etcétera.

Una manifestación que culminó con la lectura, muy jaleada y aplaudida, de un impecable, complejo y completo manifiesto en el que, según la opinión de esta firmante, tan sólo faltó la apuesta firme y decidida por el abolicionismo de género.

En cualquier caso, gracias al Movimiento Feminista de Sevilla, a la Plataforma 8 de Marzo, junto a todas las asociaciones y colectivos que las integran, por el trabajo y el esfuerzo realizados en esta convocatoria.

GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.

Post scriptum:

La alusión a la abolición del género si estaba en el manifiesto y así lo han resaltado algunos medios andaluces. Este es el párrafo completo:

«El género es una construcción patriarcal que pretende que las mujeres seamos cosificadas, oprimidas y explotadas. El derecho que tienen todas las personas transexuales a vivir su propia vida con dignidad, sin violencia, sin discriminación y con todas las oportunidades, no debe ser utilizado por el poder político a través de la llamada autodeterminación de género, para arrebatarnos nuestros derechos y que las mujeres desaparezcamos política y jurídicamente, incluso del lenguaje y de las estadísticas»

Escrito y rectificado queda.

Vísperas del #25-N en Sevilla, SOMOS ELLAS: La punta del iceberg

La plataforma feminista SOMOS ELLAS cuya «misión clara y urgente es erradicar los feminicidios en España y darles visibilidad», ha organizado esta noche en Sevilla una concentración de una hora de duración – en el trianero Muelle de la Sal, junto a la escultura de Chillida – para honrar y recordar a las víctimas del terror machista.

Mujeres con túnicas y máscaras blancas, portando velas, han bajado en actitud de silencio y respeto a un espacio donde se podían leer todos los nombres de las asesinadas desde el #25N2023 hasta este #25N2024, junto a una pancarta que recordaba que las 101 eran sólo la punta del iceberg.

Porque no sólo se han contabilizado a las «oficiales», ejecutadas por sus parejas o exparejas, sino a las que perdieron la vida a manos de proxenetas, hijos, familiares o allegados, entre un largo etcétera que incluía a l@s menores víctimas de la violencia vicaria.

Así se han ido desgranando sus identidades, iniciales o, en su caso, anonimato, edades y lugares donde las mataron, detallando más los contextos y situaciones de estos brutales crímienes en el caso de las andaluzas.

Y entre cada una de ellas se nos recordaba que «los feminicidios se producen porque el Estado no crea, ni garantiza, las condiciones para que las mujeres podamos desarrollar nuestras vidas en libertad»

60 minutos intensos, de respeto, dignidad, dolor, duelo y reconocimiento a quienes ya no están, a hermanas de todas las edades a quienes les arrebataron vidas y futuros. Que sus nombres no se borren de la Historia y de la Memoria Feminista.

Gracias a SOMOS ELLAS SEVILLA. GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.

Y mañana, #25-N, la manifestación partirá a las 19.30 de la Plaza Nueva. No nos mires, ÚNETE.

Series en plataformas. Movistar Plus, ‘Querer’: Las violencias del terror machista

A cuatro días del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres, a cuatro días del #25-N, nada mejor que documentar en estas páginas la RELEVANCIA de esta miniserie de cuatro capítulos, de 50 minutos cada una.

Una serie, producción española fechada en el año en curso, que ha creado, escrito y dirigido, junto a Júlia de Paz y Eduard Sola, la guionista y cineasta vasca Alauda Ruiz de Azúa – cosecha del 78 y responsable de la galardonada ‘Cinco lobitos’ ( 2022 ) – cuya notable fotografía firma Sergi Gallardo.

De su espléndido reparto, hay que destacar a una eminente Nagore Aranburu – a ella, sobre tod@s – y a un magnífico Pedro Casablanc, muy bien secundados por Miguel Bernadeau e Iván Pellicer.

La historia – contada, como se ha escrito, en cuatro capítulos cuyos epígrafes son respectivamente: Querer, Mentir, Juzgar y Perder – sigue a una mujer que, tras 30 años de matrimonio, decide no sólo separarse, sino interponer una denuncia contra su marido por violación y agresiones continuadas.

Sus dos hijos varones, su marido y la familia de éste reciben con estupor esta noticia. Estupor y hostilidad en lo que se refiere al primogénito – que apunta en su propio matrimonio las maneras paternas… – alineado desde el primer momento con el progenitor y mayor comprensión en el menor, afín a su madre.

Una historia que nos va mostrando paso a paso el infierno de una esposa sometida por el terror y sistemáticamente violada en su lecho conyugal, incluso en sus postpartos. Hasta el punto de sufrir lesiones vaginales graves.

Una historia que nos va mostrando paso a paso todas y cada una de las violencias sufridas por la protagonista y por tantas otras en la vida real: chantajes, control también económico, posesión, insultos, vejaciones, amenazas, aislamiento de su familia y amistades, renuncia a ejercer su profesión en función del cuidado de los hijos, entre un inacabable etcétera.

Una historia que, en la doble trama judicial y familiar, nos va desgranando sin necesidad de subrayado alguno, más que la descarnada brutalidad de los hechos, las tres horribles décadas padecidas por una esposa despojada de cualquier dignidad, autonomía y respeto.

Una historia que también refleja las carencias institucionales, laborales y económicas que esta víctima, que todas las víctimas, deben afrontar: desprotección absoluta, presiones de toda índole, lentitud, incertidumbre y sufrimiento en el proceso judicial, incredulidad por estar bajo sospecha, acoso…

Una historia de la que no se harán spoilers, porque no es de recibo y porque HAY QUE VERLA. Una mirada feminista empática, solidaria, rigurosa, valiosa, valiente como su personaje central, imprescindible, implacable, durísima, compleja y desgarradora sobre todas las modalidades del terror machista y los síndromes traumáticos que provocan.

Una historia que responde a muchas dudas insidiosas sobre las mujeres maltratadas. Una historia, DE VISIÓN OBLIGADA, UN VERDADERO SERVICIO PÚBLICO, QUE DEBERÍA TENER UNA PROYECCIÓN Y DIFUSIÓN EN TODOS LOS ESTRATOS SOCIALES.

NI SE LES OCURRA PERDÉRSELA.

SEFF, 2024, 21 Edición. Palmarés: En honor a la verdad

Esta firmante se disculpa por su silencio tras el Palmarés de ayer del SEFF, habida cuenta de que ha estado publicando de dos a tres crónicas diarias, casi todas de la Sección Oficial, desde el comienzo del Certamen.

En honor a la verdad, le fue imposible ver, por una circunstancia sobrevenida, la película ganadora. Luego, el ritmo de las proyecciones, y el de las consecuentes entradas en el blog, se impuso y no pudo recuperarla.

En honor a la verdad, lo cierto es que pensó que no iba a tener tan mala suerte, ya que – con el máximo respeto a la decisión del Jurado – las reseñas críticas, de páginas muy solventes, de la ganadora del Giraldillo de Oro, no eran precisamente estimulantes.

En honor a la verdad, esta firmante se bloqueó al comprobar que efectivamente había resultado triunfadora. De ahí, su silencio en estas páginas y mis disculpas a ustedes. Del resto del Palmarés, que aplaude, tienen ya sus referencias en este blog.

Salvo, claro, las que no ha podido ver, ya que las proyecciones de la Sección Oficial ocuparon mañana y tarde, siendo muy complicado visionar las demás. Algo que se viene reclamando se subsane, desde hace años.

Les reitero mis disculpas.

SEFF 2024, 21 Edición. Sección Oficial, ‘Flow’: Ell@s sin nosotr@s

La frase que titula esta crítica la escribió esta firmante en redes cuando, durante el confinamiento, veíamos hermosas imágenes de animales en calles, jardines, plazas y entornos no habituales ante la ausencia humana.

Esta ausencia total de vida llamada humana, debida a una terrible inundación – sí, también aquí en esta ficción animada – es el comienzo de la historia de un adorable gatito, de pelaje gris oscuro y centelleantes ojos naranjas, que ha perdido su hogar.

Para eludir el agua, que ya se sabe cuanto la temen l@s felin@s…, se sube a lo alto de árboles y edificios de hermosas ciudades ahora progresivamente anegadas y se introduce en una casa – ¿la suya? – que parece reconocer y en cuyos jardines exteriores hay enormes estatuas de sus congéneres.

Pero no hay altura que no sea vencida por la riada, así que, y no será la única vez, cae al agua e intenta desesperadamente mantenerse a flote, cuando avista un viejo barco a la deriva y se sube a él a duras penas.

No será el único a bordo pues le acompañarán, en tan peculiar y arriesgada travesía, un perro, un lémur, un capibara y una enorme ave zancuda llamada ave secretario quien, por cierto, le salva en otra ocasión de perecer ahogado.

La convivencia entre estas especies tan diferentes y nada amistosas entre ellas no será nada fácil. Tendrán que aprender a compartir para sobrevivir, a ayudarse mutuamente pese a sus reticencias y temores y a acompañarse de la mejor forma posible.

Aquí no hay más diálogos más que los lenguajes propios de cada un@ de ell@s. Aquí no hay ningun@ a imagen y semejanza de la especie llamada humana, sino comportamientos y emociones propias de cada un@ de ell@s.

Con el pequeño felino como hilo conductor, se muestran los gestos, las actitudes, la alegría, la angustia, el miedo, la tensión, el asombro, el enfado o la ternura durante el proceso de adaptación, mientras aún más peligros les acechan…

Coproducción de animación entre Letonia, Bélgica y Francia, fechada en el año en curso, de 83 minutos de absorbente metraje. La dirige, escribe, junto a Mattis Kaza, y está a cargo de su banda sonora, junto a Rihards Zalupe, el guionista y cineasta letón Gints Zilbalodis, cosecha del 94.

Premio del Público en el Festival de Morella y cuatro en el más importante del género, el de Annecy. A saber: Especial del Jurado, del Público, Música Original y el de Fundación Gan a la distribución.

Está también en todas las quinielas de los Oscar. Todos los reconocimientos le son debidos a esta maravilla, a esta joya, a este prodigio de la animación animalista y gatófilo.

Ni se les ocurra perdérsela.

SEFF 2024, 21 Edición. Sección Oficial, ‘This life of mine’: In memoriam, Sophie

La guionista y cineasta francesa Sophie Filliéres, ya muy gravemente enferma, murió a la edad de 58 años, el 31 de julio de 2023, poco después de que se terminara el rodaje de esta que nos ocupa, su séptima película. Tanto fue así, que dejó a cargo de sus hija e hijo la finalización del filme.

La muerte planea, tan directa como sutilmente, sobre esta historia de la profunda crisis que atraviesa una publicista – excelente Agnes Jaoui, alter ego de la realizadora – en sus planos laboral, maternal, sentimental, cronológico, mental y familiar.

La muerte planea sobre esta historia de su conciencia del paso del tiempo, especialmente hostil para las mujeres en esta sociedad patriarcal y de la finitud.

La muerte planea sobre esta historia de una mujer, tan alocada, dispersa y aparentemente absurda, con frases tales como cuando le pregunta a su hermana que si ha pensado en cuantas duchas le quedan antes de morir?, o el poema de despedida, la angustia ante su proximidad o ese final tan poético y metafórico.

¿Significa todo esto que estamos ante un relato fílmico transcendente o testamentario…? Rotundamente, no. Por el contrario, es juguetón, extravagante, roza el surrealismo, se divierte con las paradojas y cuestiona los lugares comunes tanto como su propia protagonista.

Entre la comedia y el drama, dividida en tres actos nada naturalistas y de títulos onomatopéyicos, transita la despedida nada pretenciosa de una mujer cuya filmografía, hasta esta su propuesta póstuma, se nos ha quedado lamentablemente inédita en nuestro país.

Una propuesta póstuma, producción francesa, de 99 minutos de metraje, que ella también escribe. Una propuesta póstuma muy bien fotografiada por Emmanuelle Colinot y con una lúdica banda sonora de Philippe Katerine, que también interviene como actor, interpretándose a sí mismo.

Una propuesta póstuma que cuenta con el enorme talento de la ya citada Agnes Jaoui y del resto de un reparto más que competente. Una propuesta póstuma no exenta de defectos y carencias, pero enormemente valiosa y relevante.

Honren la memoria de Sophie Filliéres, viéndola. No lo lamentarán.

Escrito queda.

SEFF 2024, 21 Edición. Sección Oficial, ‘Banzo’: El esclavismo inicuo, la fatal nostalgia…

Tras la entrada anterior con la infamia segregacionista del apartheid, seguimos con el inicuo esclavismo en esta coproducción entre Portugal, Francia y Países Bajos (Holanda), fechada en el año en curso, de 127 minutos de metraje.

Escrita y dirigida por la profesora, guionista, fotógrafa, ayudante de dirección y cineasta lusa, Margarida Cardoso, cosecha del 63, una de cuyas señas de identidad fílmica es la memoria histórica de su país y más concretamente su pasado colonialista.

Muy bien fotografiada, con los claroscuros que requiere la historia, por Leandro Ferräo y otro tanto puede decirse de la banda sonora, que firma Rudgert Zuydervelt.

Su reparto coral sabe transmitir toda la crudeza y la desolación de un drama, narrado a ritmo lento, pero absorbente para quien esto firma, en el que un joven médico entra a trabajar en una plantación de una isla tropical de la costa africana.

Allí, hombres, mujeres y niñ@s de color son tratad@s cruelmente como esclav@s, aunque oficial y cinícamente, puedan acceder, con un alto precio, a su liberación. El sometimiento, a todos los efectos, al amo es absoluto.

Entre ellas y ellos se ha desarrollado un mal incurable llamado banzo, definido como «el procedimiento psicológico o sentimiento patológico de nostalgia incurable experimentado por l@s esclav@s negr@s hacia su cultura, cuando se ven despojad@s de ella, de su tierra y de sus raíces»

Más aún, sin tener la consideración de personas, a merced de las órdenes y deseos del señor, la señora y los empleados, castigados y oprimidos. Los síntomas consistían en una suerte de apatía absoluta, falta total de apetito – por ello, les forzaban a comer, cada dos días, una práctica dolorosa, violenta y atroz – y debilidad extrema.

Así que el joven médico, algo más civilizado y sensible que su predecesor, poco podía hacer por ell@s – las mujeres, además, cargadas con bebés y niñ@s a quienes no les era posible alimentar – más que impedir, dentro de sus limitaciones, que la barbarie fuera aún peor.

La mirada de la realizadora es mesurada y contenida, aún dentro de los horrores que están narrando. Queda patente su compromiso con las víctimas, con sus miradas, con sus silencios, con sus sufrimientos, con sus añoranzas y con su impotencia.

Pero tampoco es maniquea en la que dirige a los esclavistas, entre quienes sabe distinguir las jerarquías, responsabilidades en los maltratos y servidumbres. Planea sobre ella una constatación de la autoconsideración de la superioridad que creen tener de clase y de raza.

Deberían verla, es un consejo.

Escrito queda.

SEFF 2024, 21 Edición. Sección Oficial, ‘Ernest Cole: Lost and Found’: Imágenes contra la infamia

Un hombre negro, nacido en un barrio pobre y excluído, pero donde tuvo una infancia muy feliz, siempre añorada, mira a través del objetivo de su cámara y fotografía calles y entornos en Sudáfrica.

Un hombre negro capta rostros, actitudes, casas, autobuses atestados de personas de su raza, a las que no se les permite viajar en los vehículos de las personas blancas, ni en el metro, ni en los trenes, ni sentarse en los bancos, ni a su lado en las iglesias, ni un largo e intolerable etcétera que deben soportar y asumir bajo el riesgo de ir a la cárcel o de su integridad física.

Un hombre negro que ha estudiado con un método inferior y menos cualificado reservado a personas de su color, pero que, por su talento, consigue colaborar en revistas y agencias.

Un hombre negro que se radicaliza políticamente y toma conciencia de su propia e injusta opresión y la de l@s suy@s en su país, a través de sus relaciones con los mejores artistas de su época.

Un hombre negro que llegó a escribir un libro con sus imágenes contra la infamia de, en sus propias palabras, «trescientos años de supremacía blanca que nos ha colocado en una esclavitud despojada de dignidad, robado nuestra autoestima y rodeado de odio»

Un hombre negro cuyo volumen citado se prohibió y a él la vuelta a Sudáfrica. Un hombre negro, que por entonces estaba en su Nueva York soñada como paraíso de libertad e igualdad, y que le devolvía de nuevo el rostro desolado de la discriminación y el racismo.

Un hombre negro que captó incansablemente a l@s suy@s, de todas las edades, en varias ciudades y continentes, en miles y miles de negativos. Que los captó en su explotación, miseria, segregación y apartheid, pero también en sus juegos, risas, actividades culturales, tareas o placeres cotidianos.

Un hombre negro que siempre ansió volver a su país y a ver a su madre, algo que repetía incansablemente en sus escritos. Un hombre negro que sólo lo logró con sus cenizas, que se esparcieron en su querido barrio.

Un hombre negro que respondió al nombre de Ernest Cole, nacido en 1940 en Pretoria y fallecido en Nueva York en 1990, de un cáncer de páncreas, cuando aún no había cumplido los 50 años.

Un hombre negro a quien todos los reconocimientos le son debidos. Como el que le hace con este extraordinario documental nada al uso, otro hombre negro, que también escribe su guion: el documentalista, activista político y cineasta haitiano, que llegó a ser ministro de Cultura en su país, Raoul Peck, cosecha del 53, entre cuyos créditos está la notable ‘I am not your negro’ (2016).

La mirada de Peck se funde con la de Cole a través de cientos de las admirables fotografías de este último, la mayoría en blanco y negro, y de la voz en off con sus frases, opiniones y pensamientos que interpreta muy bien el actor Lakeith Stanfield.

Sus excelentes facturas visual y sonora se deben respectivamente a Wolfgang Held, Moses Tau y Alexei Agui. Fascinante, necesario, valioso y relevante documental que rinde tributo a un personaje único.

NI SE LES OCURRA PERDÉRSELO.

SEFF 2024, 21 Edición. Sección Oficial, ‘Alpha’: Nos vemos allá arriba

Fíjense ustedes que esta firmante no es aficionada al alpinismo, ni lo sigue como espectadora, lo cual no excluye su total respeto a quienes practican, de forma profesional o amateur, esta disciplina deportiva tan arriesgada.

Lo cual no excluye su admiración por los espacios en los que se desarrolla. Por ejemplo, los impresionantes paisajes alpinos de esta película que nos ocupa. Una película que, de entrada, no le apetecía mucho ver y cuyo desarrollo, dada su sinopsis, creía previsible…

… Pero, afortunadamente, estaba equivocada. Porque la historia de un hijo que es instructor de esquí, que recibe la visita inesperada de su padre actor, del que está distanciado por las opuestas formas de vivir el duelo por su madre y esposa recientemente fallecida. De hecho, está saliendo con una chica menor que él…

El progenitor es, al contrario que el joven, impulsivo, imprudente, algo cotilla y se permite abusos de confianza con la novia de su hijo, comentarios racistas incluídos. Entre los celos y el enfado por tal comportamiento, este desea que se marche lo antes posible.

Entonce se plantea una excursión de esquí en grupo y el padre, reticente primero, accede a unirse y…

Hasta aquí, los lugares comunes y clichés amenazaban la historia pero aunque ambos, solos ante un peligro muy real, con el más joven muy resentido y rivalizando, aprenden a cuidarse mutuamente, pues uno y otro se accidentan y lastiman intentando buscar el camino de regreso, y expresarse un sincero afecto, un giro inesperado la hace transitar por derroteros sorprendentes.

Coproducción entre Holanda, Suiza y Eslovenia, fechada en el año en curso, de 100 minutos de metraje. Escrita y dirigida por el actor, guionista y cineasta holandés Jan Willem van Ewijk, cosecha del 70.

Con una impactante fotografía, que te sumerge en la desasosegante belleza de unas montañas únicas, que firma Douwe Hennink y en la ajustada banda sonora de Ella van der Woude. Los actores que interpreta a los personajes centrales son padre e hijo también en la llamada vida real.

Fue galardonada con el Europa Cinema Label en el Festival de Venecia y se oyeron aplausos, justos y merecidos, al final de su proyección. Deberían verla.

Escrito queda.