Estamos ante una producción estadounidense, que comenzó su andadura en 2017. Consta de dos temporadas – ambas de ocho episodios, de 42 minutos de duración, en clave de misterio o thriller psicológico – dedicadas cada una de ellas a un caso de asesinato. Solo que el misterio no reside en el quien, sino en el por qué. ¿Por qué una joven mata a plena luz del día, delante de su familia y de decenas de testigos, a un chico aparentemente desconocido…? ¿Por qué un niño de 11 años confiesa haber envenenado a sus cariñosos padres…? ¿Por qué si ni la una, Cora – maravillosa Jessica Biel – ni el otro, Julian – asombroso Elisha Henig – responden a los perfiles de criminales y se muestran anonadados, estupefactos y contritos respecto a los terribles actos que perpetraron…?
Son historias distintas, sin ninguna conexión entre sí, más que una temática de fondo compartida, que esta firmante no va a desvelar, y un personaje singular que les conduce, implicándose de forma intensamente personal, al corazón de las tinieblas del pasado que guarda la clave de estos hechos de sangre. Se trata de un detective, Harry Ambrose – inmenso Bill Pullman – atormentado, perdido, dueño también de secretos inconfesables, que se reconoce en la mujer y en el niño.
Serie que puede, y debe, verse en la plataforma Netflix, aclamada por crítica y público y reconocida en nominaciones a premios prestigiosos. Creada y producida por Derek Simonds – quien también la escribe junto a Jesse Mckeown, Liz W. Garcia, Tom Pabst y Petra Hammesfahr, en cuya novela homónima está basada. Quien también la dirige – junto a Antonio Campos, Brad Anderson, Cherien Dabis y Tucker Gates. La fotografía, llena de matices, la firman Jody Lee Lipes y Radium Cheung y la banda sonora, pródiga en modulaciones, se debe a Ronit Kirchman. Del reparto, destacar además nombres como los de Natalie Paul, Carrie Con o Christopher Abott, entre otr@s excelentes secundari@s. Fuente: Filmaffinity.
‘The Sinner’ nos asoma a los devastadores abismos de lo que es dado en llamar el alma humana, a la oscuridad de sus deseos, afectos y pasiones, a los estragos de la culpa, a los irreparables daños de los fanatismos, a la inocencia abocada, aún contra sí misma, a comportamientos atroces, a lo amado y perdido, a… Y lo hace con desgarro, intensidad, negrura, crueldad, desasosiego, sensibilidad y comprensión infinitas.
Compruébenlo viéndola. Bajo ningún concepto deberían perdérsela. Y, por cierto, la tercera temporada, el tercer caso, se estrena el próximo viernes, 19 de junio.