Nell Leyshon es una singular creadora inglesa, de la cosecha del 62, nacida en Somerset y residente en Londres, quien trabajó como ayudante de producción en anuncios televisivos nada menos que con los hermanos Scott, Tony y Ridley, aunque solo fuera alimenticio y no le gustara demasiado. Comenzó a escribir tarde, pero…¡¡¡de qué manera!!!
Dramaturga para la radio, BBC 3 y 4, siete piezas, y para las tablas, tres y una adaptación, siendo la primera mujer cuya obra se representó -¡¡¡tras 400 años!!! -en el Shakespeare’s Globe. En cuanto a las novelas…, cuatro premiadas y reconocidas. Especialmente esta, ‘Del color de la leche’ (2012) que ha encandilado a público y crítica, y reconocida con numerosos premios y nominaciones.
A propósito de ella, Premio a la Mejor Novela de 2014 del Gremio de Libreros de Madrid, el Centro Andaluz de las Letras, dentro de su ciclo Letras Capitales, organizó ayer en la biblioteca Infanta Elena de Sevilla, un encuentro de la autora con sus lectores y, especialmente, lectoras pues fuimos amplia mayoría.
Un encuentro, a modo de diálogo y debate a la manera de un club de lectura, que coordinó excelentemente, como no podía ser menos, una librera muy conocida y prestigiosa de nuestra ciudad, alma y titular de la imprescindible El Gusanito Lector, Esperanza Alcaide Rico.
Un encuentro en el que destacó la arrolladora personalidad de la escritora. Cercana, vitalista, lúcida, divertida, brillante y generosa nos regaló, con su propia voz y en su lengua materna – aunque tuviera la deferencia de hablar en la nuestra todo el tiempo – fragmentos de ese relato tan lírico y tan duro, tan inocente y tan cruel, tan descarnado como conmovedor y de lectura obligada, que sonaba, como no podía ser menos…, aún mejor en su versión original.
Un encuentro en el que nos contó las emotivas historias de algunas de las Marys – su inolvidable, adorable protagonista, tan sometida al orden patriarcal más feroz, pero tan valiente y decidida – que se ha encontrado en sus viajes. Un encuentro en el que confesó estar «poseída» por el personaje, y por su manera tan particular de escribir y de expresarse, tiempo antes de llevarlo al papel.
Un encuentro en el que nos relató las novelas suyas anteriores que había quemado por no parecerle dignas. Un encuentro en el que comentó su forma de escribir, tan instintiva como perfeccionista, y que lo hacía mientras cocinaba, fregaba o planchaba… Un encuentro en el que dijo haber escrito un final diferente, que descartó, pero no quiso hacer spoiler contando cual hubiera sido. Un encuentro, saben, Memorable. Así, con mayúsculas.
Cuando quien esto firma, se acercó para felicitarla y para que le dedicara su ejemplar, la sorprendió con un : «Gracias por tus preguntas». Gracias a ti, Nell Leyshon, gracias a tu obra, gracias a tu Mary, gracias a Esperanza Alcaide, gracias al Centro Andaluz de las Letras, gracias a Letras Capitales, gracias a la Biblioteca Pública Provincial Infanta Elena y a su titular. GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.