Otra sesión para el recuerdo la de esta tarde-noche de nuestra tertulia de cine que nos regaló, además, a la salida, una luna llena de película… Animada, participativa, estimulante, divertida, enriquecedora, pródiga en miradas, visiones y opiniones tan relevantes y de las que tanto se aprende. Los adjetivos se quedan cortos ante la realidad de estos encuentros tan diferentes cada vez y siempre interesantes.
Como este del miércoles, 3 de mayo, que tuvo lugar excepcionalmente a las 20 horas, en nuestra sede de Casa del Libro Velázquez. Como este tan especial que va a resultar, de nuevo, un verdadero reto registrarlo en esta crónica. Pero, nobleza obliga, hay que intentarlo. Esta firmante les pide disculpas de antemano por los olvidos y esquematismos inevitables.
El amour fou obsesivo, patológico, mitómano, producto de un malentendido fundamental y de la represión de la homosexualidad y la anulación radical de la mujer, como ciudadana y como persona, en la Rusia del siglo XIX, que muestra ‘La mujer de Tchaikovsky’, de Kirill Sbrennikov, interesó en general aún con ciertas reservas.
Este retrato de una dama y de un matrimonio fue admirado en su factura impecable, en su ambientación, en su fotografía, en su puesta en escena, en su penetración al revelar la psicología de la protagonista, en su visión tan devastadora de las diferencias entre clases en el país, en la eminente composición de una extraordinaria Alyona Mikhailova.
Aunque se le reprocharan su excesivo metraje, las carencias de un guion que algun@s encontraron magnífico, sus saltos espacio-temporales, su dispersión… Pero, en general, aprobó con nota. Y más aún al complementarla Quique Colmena con ‘La pasión de vivir’, de Ken Russell, que aborda el mismo tema y que ha envejecido tan mal.
‘Conspiración en El Cairo’, de Tarik Saleh, fue saludada con entusiasmo en su implacable denuncia de la lucha por el poder tanto en el plano político como en el religioso, pese a sus interacciones mutuas en este caso. Se admiró la factura europea al filmarla y el privilegio del voyeurismo al contemplar un singular microcosmos, rotundamente masculino plural, quizás demasiado para algunas, que no es dado ver en el cine.
Se admiraron su factura, sus planos, su enfoque, su condición casi de documental antropológico, Se destacaron sus luchas de poder hasta llegar al crimen, sus mafias, que se consideraron similares en otras confesiones religiosas, aunque no haya equidistancia posible. Su condición de thriller político religioso aunque también se consideró que sobraban parte del metraje, tantas salmodias y cantos y que generaban una cierta confusión las distintas ramas de este credo.
Y unanimidad en el aplauso para ‘Plan 75’, la ópera prima de Chie Hayakawa. Esta distopía de un futuro que ya está aunque sin los tintes tan feroces de ese siniestro programa, pero… hubo que recordar los más de siete mil ancian@s muert@s en las residencias por el protocolo de Ayuso que les impidió la asistencia hospitalaria durante la pandemia, el trato que se les da en algunos de esos centros o la consideración de las personas mayores como improductivas, entre un largo etcétera.
Se admiró su contención, su delicadeza, su clasicismo en el fondo y en la forma deudor del mejor cine japonés. Sus personajes, la evolución que van sufriendo a tenor de las circunstancias durante el metraje. Desde la extraordinaria anciana protagonista, hasta l@s jóvenes partes activas de ese siniestro pacto mortífero.
Hubo quien se sintió interpelada y conmovida al tener esa edad. Quien señaló el retrato de una octogenaria en un trabajo estresante y viviendo en precario. Quien hubiera preferido un mayor desgarro, aunque la escena de las camillas roza lo insoportable visualmente. Pero se valoró que no hiciera pornografía emocional con un tema tan duro, que se prestaba a todos los excesos, y que tal contención era fruto también de las cultura y tradición niponas…
El miércoles, 7 de junio, a nuestra hora habitual de las 19.30, en Casa del Libro Velázquez, más. Será la sesión de fin de curso y de temporada. Debatiremos tres películas del mayor interés sobre el papel. A saber:
La francesa ‘Mi crimen’, de François Ozon. Se estrena este viernes, 5 de mayo. VÉANLA CUANTO ANTES.
La también francesa ‘Dialogando con la vida’, de Christophe Honoré. Se estrena el viernes, 12 de mayo. VÉANLA CUANTO ANTES.
Y la iraní ‘Los osos no existen’, de Jafar Panahi, que entra el viernes, 26 de mayo. VÉANLA CUANTO ANTES.
Gracias a Rubén Margallo, a todo el estupendo equipo de la librería, a María Victoria Segura Raya, a Soledad Granero y a mi hermana Concha Jiménez, por sus magníficas fotos de ambiente y de familia. A Quique Colmena, muy cualificado crítico y querido amigo, que está felizmente de vuelta compartiendo los muchos trabajos de la tertulia e impartiendo lecciones de cine. Y a l@s mejores tertulian@s del mundo mundial por hacernos disfrutar y aprender tanto en cada sesión. GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.