Archivo mensual: febrero 2022

No sólo cine, Sevilla animalista: ¡¡¡NO A LA CAZA!!!

Cientos de personas de toda edad y condición, humanas y no humanas, nos hemos manifestado hoy en Sevilla contra la barbarie de la caza. Convocada por la Plataforma No a la Caza, fue secundada también por PACMA y por diversos colectivos y asociaciones de defensa de los derechos animales.

En la ciudad, el sol deslumbrante de este invierno-primavera que vivimos parecía saludar y aportar aún más luz y calor a tanta hermosa gente animalista que clamaba contra la barbarie asesina que llena de sangre inocente los campos y los montes.

Contra las escopetas asesinas de gente armada y peligrosa, para el medio ambiente y para todas las especies, que disfrutan matando y con los trofeos de sus víctimas. Contra la denominación de deporte a lo que es un crimen cobarde y alevoso.

Contra la utilización de galg@s y otras razas de perr@s en tan indeseable actividad que luego, cuando no les sirven, los ahorcan o torturan hasta la muerte. Contra esta atrocidad incompatible con una sociedad democrática y civilizada.

Por las criaturas sintientes de todas las especies masacradas por escopeter@s. Contra todas las torturas. Para que no queden impunes. Porque no pararemos hasta su prohibición…

Por todo ello, hemos recorrido y dignificado el centro histórico sevillano partiendo de la estación de metro del Prado de San Sebastián, calle San Fernando, Avenida, para culminar en la Plaza Nueva. Por todo ello, tantas mujeres, hombres, niñas y niños llevaban a sus compañer@s de vida. Muy principalmente a l@s galg@s.

Una chica le enseñó a esta firmante la marca del cuello y las cicatrices, señales del intento de ahorcamiento y malos tratos, de su preciosa perra. Emocionante ver a otra con un carrito que le permitía moverse pese a sus patas traseras paralizadas. O la incontenible alegría de estas criaturas oliéndose y saludándose entre sí.

Sabían, saben, que les prestamos voces contra sus enemigos jurados, que son los nuestros. Por ello, coreamos, y nos rompimos las gargantas, eslóganes como: No a la caza, No es un deporte/es asesinato. Maltrato animal/al Código Penal, Yo no disparo, Ni ciervos abatidos/ni perros sometidos, Con el sufrimiento/yo no me divierto, Esta barbarie/la vamos a parar, Y luego diréis/que somos cinco o seis y tantos otros…

Una cita imprescindible, una lucha necesaria contra unas masacres a abolir. Contra una indignidad criminal que nos envilece como país y como democracia. No pararemos hasta su prohibición.

Tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 2 de febrero, a las 19.30, en Casa del Libro Viapol. Temporada 9: Miradas y voces…

La segunda sesión de este año de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra resultó multitudinaria, animada, enriquecedora como siempre y muy, muy, muy divertida. De hecho, había tantas ganas de comentar las películas que el patio estuvo algo revuelto, en el mejor sentido del término, aunque fuera pisándose las palabras o comentando las aportaciones de cada cual…

Miradas y voces las vuestras imprescindibles en cada encuentro. Tan singulares, personales e intransferibles tanto en las coincidencias como en las discrepancias. Valiosas y relevantes lecciones de cine y de vida con las que esta firmante siempre aprende y pide, en este caso, disculpas de antemano por la imposibilidad de trasladar al papel la lucidez, la sutileza, los conocimientos y la sabiduría de vuestras lecturas de los deberes cinéfilos a debate.

Enrique Colmena, crítico, amigo y compañero en las tareas de coordinación de esta actividad impartió, como en cada encuentro, su magisterio cinéfilo. Introdujo a la perfección ‘El callejón de las almas perdidas’, de Guillermo del Toro. Empezando por el autor de la novela en la que se basa, William Lindsay Gresham, brigadista internacional en la Guerra Civil luchando en el batallón Abraham Lincoln y que extrajo la historia de la experiencia en una feria ambulante de un compañero de armas, médico de profesión.

El crítico y amigo comentó que podría verse de dos maneras: sin conocer la original, de 1947, dirigida por Edmund Goulding, en Filmin, o habiéndola visionado.

Desde ese punto de partida,´se decantó absolutamente por la primera, en la más amplia acepción del término, reprochándole a la actual su metraje excesivo, desequilibrios narrativos y enfoques de la historia heterodoxos en el peor sentido. Aunque aplaudiendo la brillantez de sus factura y puesta en escena. Y su reparto de auténtico lujo.

Esta firmante pensó que , aún asumiendo esos defectos, se quedaría sola en su afecto por la versión del mexicano. Pero, muy al contrario, interesaron mucho su fatalismo, su nihilismo existencialista, su visión demoledora de la vida y de la especie llamada humana. Su negrura y oscuridad que no dejan títere con cabeza. También la cultura de la muerte, de los monstruos, del esoterismo, el barroquismo que la impregna…

Su libertad narrativa frente a la férrea censura del Código Hays de la de Goulding, que parece luminosa y entrañable a su lado y su contexto histórico y socio-político entre la Gran Depresión, el New Deal y la Segunda Gran Guerra, su fidelidad al texto literario. Incluso el metraje no pesó, con ciertas excepciones.

‘El pacto’, de Bille August sobre las memorias del poeta Thorkild Bjornvig, en la que documenta su relación de sumisión a la voluntad de Karen Blixen a cambio de fama y libertad creativa, dió lugar a uno de los debates más chispeantes. agudos y divertidos que quien esto suscribe recuerda.

Como en lo que la película retrata del lado más oscuro y manipulador de la autora – la llamaron irónica y certeramente mala, mala, mala – aunque hubo algunas que la hubiesen preferido aún más villana, la Bette Davis de todo eso… La Amparo Rivelles de todo eso, también, incluso en su peculiar elegancia. Y en cuanto al personaje masculino le denominaron pamplinas, aprovechado ý cómplice, considerándolo desvaído entre sus compañeras de reparto, que se lo meriendan sin problemas.

Entre la sutileza, la contención y la frialdad, con una excelente factura, pero se estimó que se queda a medio gas, sin llevar el relato hasta sus últimas consecuencias. Ni en la maldad presunta de una mujer que, ciertamente, dejó cadáveres casi literalmente e infelicidad por el camino, pero que no tuvo nunca la oportunidad de dar su versión, ni ser retratada en su registro más doliente por su sífilis y el tratamiento venenoso a base de mercurio. Ni…

‘En un muelle de Normandía’, de Emmanuel Carrére, suscitó aclamaciones casi unánimes. Por su adaptación del libro-reportaje con el que, en plena crisis del 2008, la periodista Florence Aubenas documentó, haciendo una inmersión en ella, las extremas explotación y precariedad laborales del batallón de limpiadoras-es del ferry de Normandía, del transbordador en el que trabajan a destajo, debiendo hacer más de 200 habitaciones en cuatro minutos cada una, por un sueldo de miseria.

Explotados ambos sexos, sí, pero ellos no hacen los servicios. Unos servicios repugnantes, llenos de heces y vómitos, que el libro y la película han contribuído a mejorar, lo mismo que los salarios. Un relato sobre la mentira, la impostura, dos leit motivs del escritor, y realizador en este caso, aunque estuvieran llenas de buenas intenciones.

Un tratamiento contenido y profundamente emotivo al que un reparto no profesional, con una excelsa Juliette Binoche al frente, principal promotora de esta adaptación. Un relato sobre esas vidas extremas que llevan personas, mujeres sobre todo, llenas de conciencia de clase, de solidaridad, de sororidad, de empatía, de afecto… Con detalles conmovedores que aquí no se desvelarán porque está en cartelera y no hay que perdérsela.

Una película necesaria, Necesaria es el título del hermoso artículo que la excelente escritora comprometida y feminista, Marta Sanz, ha publicado en El País sobre ella y que me pasó mi querida hermana Concha Jiménez, siempre fiel a la tertulia.

Una película que caló, convenció y emocionó aunque se le reprochara una cierta tosquedad en su acabado. Producto de la inexperiencia de Carrére tras la cámara. Una película nada autocomplaciente, con un final duro y honesto. Una película…

El miércoles, 2 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Viapol, más. Debatiremos tres propuestas sobre el papel más que estimulantes y con las mejores referencias y galardones. Dos miradas femeninas y una masculina para este mes de las mujeres. A saber:

La japonesa ‘Drive my car’, de Ryusüke Hamaguchi, que llega cargada de premios del máximo prestigio en su imparable carrera al Oscar a la Mejor Película Internacional. Se estrena mañana, viernes 4 de febrero. VÉANLA CUANTO ANTES.

La norteamericana ‘La hija oscura’, debut tras la cámara de la excelente actriz Maggie Gyllenhaal, precedida de las mejores referencias y galardones. Se estrena el viernes 18 de febrero. VÉANLA CUANTO ANTES.

Y la belga ‘Un pequeño mundo’, de Laura Wandel, Premio FIPRESCI de la Crítica en el Festival de Cannes. Se estrena el 25 de febrero. VÉANLA CUANTO ANTES.

Gracias a Casa del Libro Viapol, a Rafael García, Marina Alonso Espejo y a todo el magnífico equipo de la librería. Al crítico y amigo Enrique Colmena por compartir los trabajos de coordinación de esta actividad. Y a los mejores tertulianas y tertulianos del mundo mundial por enseñarme tanto en cada encuentro y por convertir cada sesión en una velada memorable. GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.

‘El pacto’: Isak, Karen, Thorkild y Bille

De Isak Dinesen, seudónimo de la autora danesa que se glosará a continuación, esta firmante, que la admira enormemente, pese a que era cazadora…, ha leído ‘Una historia inmortal’- que Orson Welles adaptaría al cine en 1968, convirtiéndola en una obra maestra -; ‘Memorias de África’ – que Sidney Pollack trasladara al cine en 1985, ganando 7 Oscar con ella y convirtiéndola en un clásico -; ‘El festín de Babette’ – que Gabriel Axel trasladara al cine con excelencia en 1987 y que fue la primera danesa en ganar un Oscar a la Mejor Película en Lengua No Inglesa -; ‘Siete cuentos góticos’, ‘Vengadoras angelicales’, ‘Lejos de África’…

De la vida de Karen Blixen, nacida Karen Dinesen, tan conocida, reconocida, prestigiosa y premiada, la autora en cuestión (1885-1962) esta firmante ha sabido además de por su escritura ya citada, y textos sobre ella, por más películas que la glosan como protagonista. Entre ellas, de nuevo ‘Memorias de África’, o la notable española ‘Karen’, (2020), de María Pérez Sanz. Y la que nos ocupa.

Del escritor y poeta danés Thorkild Bjornvig (1918-2004), esta firmante ignoraba su existencia y la relación que le unió a la protagonista. Pese a que él lo documentó en sus Memorias. Memorias que sustentan ‘El pacto’, última entrega cinematográfica de su prestigioso compatriota Bille August…

…Del guionista, director de fotografía, de televisión y de cine, Bille August, cosecha del 48, dos veces ganador de la Palma de Oro en Cannes, entre tantos otros reconocimientos, por, respectivamente, ‘Pelle el conquistador’ (1988), ‘Las mejores intenciones’ (1992), ‘Tren de noche a Lisboa’ (2013) o ‘Corazón silencioso’ (2014), cuya crítica puede leerse en este blog.

Al realizador le ha interesado, en este caso, el lado más oscuro, insidioso y manipulador de la autora. El que supuso su relación, su pacto – cuando ya tenía 63 años, había regresado a su Dinamarca natal desde el África de sus amores, seriamente enferma de sífilis, que le contagió su marido el barón Blixen, tres décadas antes, conservando intacto todo su prestigio y sonando siempre para el Nobel – con Thorkild que contaba entonces con 29.

Ella le propuso, y así lo relatan el libro y la película, ser su mecenas, asegurarle un lugar – que creía que merecía, pues pensaba que tenía talento y de ahí el acuerdo – en el Olimpo literario. Pero, a cambio, debería vivir en su casa y estar disponible para todas sus indicaciones de trabajo literario, viajes de formación vida social. Sufragaba todos sus gastos, pero le hizo, con el consentimiento no del todo libre del poeta, abandonar su vida y a su familia, mujer e hijo. Hasta que…

Con este material de partida, August ha realizado un relato fílmico de factura impecable, de puesta en escena hermosa y clásica, pero, desde quien esto firma, muy frío. Gélido y casi inexpresivo, que no llega a las últimas consecuencias de ese pacto tan perverso. Tanto es así que, pese a la solvencia y el talento de un reparto entregado, rara vez logra conmoverte y mucho menos, dada la naturaleza de lo narrado, indignarte.

O mejor dicho, algo de indignante sí que tiene. Porque esta historia necesitaba pasión, intensidad y, complejidad. Necesitaba una mirada no sólo crítica, sino compasiva hacia una mujer devastada por su enfermedad a la que apenas si retrata en su faceta más doliente. Ni tampoco en la de villana más grande que la vida. Doliente porque a los sufrimientos físicos provocados por su mal. se le unía un progresivo envenenamiento con el mercurio que le recetaban y que hizo que, finalmente, muriera de desnutrición.

O bien tener un antagonista menos débil, menos complaciente y menos sumiso. Conocer sus emociones y su rebelión ante lo que debió ser una proposición más que deshonesta. Y el realizador lo muestra poco con lo que su trabajo interpretativo también se desdibuja. Aún así, Simon Bennebjerg da la talla.

Las mujeres, por contra, están muy bien: no sólo la imponente figura central que compone con talento una Birthe Neumann – tan parecida a la Amparo Rivelles madura, como se ha señalado – sino las excelentes Asta Kamma August, su propia hija, y Nanna Skaarup Voss.

Coproducción entre Dinamarca y Suecia, de 115 minutos de metraje. El guion adaptado lo firma Christian Torpe. La excelente fotografía corre a cargo de Manuel Alberto Claro y su impecable banda sonora es de Frédéric Vercheval.

La debatiremos dentro de unas horas en la segunda sesión del año de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra de este miércoles, 2 de febrero, a las 19.30, en Casa del Libro Viapol.