‘Un héroe’: Más dura será la caída…

Un hombre bueno llamado Rahim da con sus huesos en la cárcel porque, por una traición de su socio en una empresa que quebró, no pudo pagarle el muy elevado aval que le debía a su ex cuñado que le respaldó siendo aún el marido de su hermana. Durante un permiso de dos días, intenta convencerle para que acepte el abono de una parte de la deuda para así poder salir de prisión y solventar el resto con su trabajo.

Dicha cifra la ha conseguido a través de una relación romántica que mantiene extraoficialmente con la profesora logopeda de su único hijo, que es tartamudo. Ella ha encontrado un bolso con 17 monedas de oro y ambos van al prestamista que les ofrece una cantidad irrisoria por ellas. Entre tanto, ambos deciden devolverlo y van al banco para intentar localizar a la mujer que lo ha perdido…

Allí él, como cabeza visible, da el teléfono de la prisión y todo el mundo se entera de su buena acción. La de alguien que prefiere reintegrar un dinero, que podía liberarle, a una persona desconocida, su legítima dueña.

A partir de ahí, y a través de los medios, se convierte en un héroe y una fundación benéfica se interesa por él y consigue una recaudación importante para su causa. Incluso en el ayuntamiento le prometen un trabajo. Pero todo se torcerá de una manera insidiosa y perversa y pasará a ser un individuo bajo sospecha…

El muy prestigioso guionista y cineasta iraní Asghar Farhadi – cosecha del 72, que tiene entre sus créditos títulos como ‘Nader y Simin, una separación’ (2011) y ‘El viajante’ (2016), ambas premiadas con sendos Oscar a la Mejor Película de habla no inglesa…

…Y que cuenta también con Globos de Oro, Oso de Plata y demás reconocimientos que le son debidos, sabe envolver y desarrollar esta trama, que también ha escrito, con una maestría y carga de profundidad notables.

Sabe dotar a un material narrativo, que se va complicando hasta convertirse en laberíntico y kafkiano, de una mirada inteligente, lúcida y crítica a un país, el suyo, en el que la religión no tiene nada que ver, sino que es lo opuesto, a la ética.

En el que la burocracia, guardiana de la moral, complica la vida a un ciudadano honrado al que han abocado a la deshonestidad muy a su pesar. En el que la caridad es lo contrario a la justicia social. En el que el paternalismo insoportable e insidioso de los directores de prisión se convierte en el peor abuso de poder.

En el que la mala fe, el rencor y la envidia de su acreedor no le deja más salida que un estallido de violencia, por leve que sea. En el que la señora desconocida, con toda la desgracia de su sexo en una sociedad tan profundamente misógina, que recupera el bolso y las monedas perdidos, se convierte, al desaparecer sin localización alguna, en el principal testigo de cargo en contra de su benefactor.

En el que las «fuerzas vivas» son hipócritas e indiferentes al bien común. En el que la admiración popular y la caída en desgracia son dos caras de la misma moneda. En el que los prohombres, aunque sea a una mínima escala, carecen de escrúpulos y de cualquier empatía.

En el que un hombre atípico, pero con ramalazos machistas también, no tiene más refugio que su familia, una familia cálida y unida. En el que una mujer, tan valiosa como independiente, es capaz de engañar y ponerse en entredicho para salvarle. En el que un niño hace lo propio, con todas sus limitaciones verbales, para salvar a su padre.

En el que mujeres y niñas, aunque este no sea el tema central, están veladas frente a la libertad indumentaria masculina, incluso en el interior de sus hogares, y viven bajo la autoridad conyugal o fraternal, si bien aquí no se cargan las tintas al respecto. Pero está ahí para quien quiera verlo. En el que la honradez imposible que se exige desde altas instancias no es la que se practica. En el que…

127 minutos de complejo y absorbente metraje. Su excelente fotografía la firman Ali Ghazi y Arash Ramezani. De su magnífico, y coral, reparto destacar a Amir Jadidi, Mohsen Tanabandeh y la hija del realizador Sarina Farhadi. Precedida de incontables premios, nominaciones y reconocimientos como el Gran Premio del Jurado ex aequo en Cannes y en otros Certámenes como Palm Springs y Santa Fe, es una de las elegidas para debatir en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 6 de abril, a las 19.30, en Casa del Libro Viapol.

Véanla cuanto antes. Ni se les ocurra perdérsela.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s