Archivo mensual: febrero 2023

‘The quiet girl’: Lazos y cadenas

Caít tiene 9 años y vive en el seno de una familia disfuncional, en la Irlanda rural de 1981, donde, a todos los efectos, es un estorbo. Una familia demasiado numerosa y paupérrima, con un padre miserable que se bebe los pocos ingresos que tienen y una madre hastiada y resignada, a punto de parir, que también es incapaz de dar afecto.

Con unas hermanas y hermano que la ignoran e incluso también les parece un fastidio porque, de resultas de todo ello, padece enuresis y moja la cama, que no tiene más mudas, cada día. Una niña que ha hecho del silencio, tan sólo emite un pequeño hilillo de voz tímido y asustado cuando le preguntan, y un perfil muy bajo, su forma de defenderse ante este entorno tan hostil. Y no es el único, porque en el colegio también sufre burlas y acoso al no saber apenas leer, estar mal alimentada y descuidada en su aseo personal.

Esta niña es enviada a casa de una prima de su progenitora y su marido cuando su madre va a dar a luz. Al principio temerosa, pronto va descubriendo un mundo nuevo: un microcosmos donde reinan la bondad, la delicadeza, el respeto y la empatía. Sobre todo, por parte de la mujer. El hombre, más reacio y luego se sabrá por qué, pronto se descubrirá como amable y afectuoso.

Un mundo donde ella no es una carga, sino que es integrada en todas las tareas de la casa y de la granja. Aunque ya saben que a la animalista que esto firma no le gustan nada estos entornos con especies no humanas – «Ningún animal ha sido maltratado durante el rodaje de esta película», como reza al final de los títulos de crédito – sí le emocionó que la protagonista interpelara a su acogedor sobre la leche que le dan al ternero: «¿Es de su madre?» y al responderle este que no, que era en polvo, ella dice a su vez: «¿Y por qué no tomamos nosotros leche en polvo?»

La pequeña pasa así de las cadenas a los lazos. De una casa astrada, oscura y caótica a una limpia, ordenada y luminosa, donde es querida y apreciada. Donde le enseñan también a leer mejor y a correr. Donde se siente muy valorada y valiosa.

Aunque también en ese microcosmos hay secretos que le van a ser revelados, de la peor manera posible, por bocas de gente mezquina que sólo sabe dañar, hurgando en las heridas más íntimas y profundas. Todo ello coincidiendo con la hora de volver a esa casa que nunca fue un hogar para ella. Y…

El irlandés Colm Bairéad, cosecha del 81 y con una escueta filmografía a sus espaldas, ha realizado con un formato cuadrado 4.3, que sirve de marco perfecto a la historia, la primera película hablada en su idioma nativo, el gaélico, combinado también con el inglés, adaptando libremente una novela corta de su compatriota Claire Keegan, ‘Foster’, título que alude al alimento, a la crianza, no sólo en el sentido literal del término sino el de la nutrición afectiva esencial para el desarrollo.

Pero, sobre todas las cosas, ha conseguido un milagro. Un milagro de sutileza, de sensibilidad, de una emoción tan contenida como desbordante, una hermosura, una joya que puede leerse tanto en clave crítica y social a una época y a unos lugares donde el maltrato infantil, por activa y por pasiva, era la regla y no la excepción. O en clave de leyenda, de cuento, vistos a través de la mirada de la protagonista, una inmensa actriz debutante, Catherine Clinch.

Preciosa, delicada y conmovedora producción irlandesa fechada el pasado año, de 95 minutos de metraje. La fotografía con excelencia una mujer, Kate McCullough y su música, que tan bien modula lo narrado, se debe a Stephen Rennicks. Del resto de un reparto en estado de gracia destacar a una maravillosa Carrie Crowley y a Andrew Bennett. Entre sus reconocimientos están tres premios en la Seminci vallisoletana, incluyendo la Espiga de Plata, el Oso de Cristal en Berlín y la candidatura al Oscar a la Mejor Película Internacional.

Es una de las elegidas para debatir en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra de máñána, miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez. ÚNANSE. Tanto si vienen por primera vez, como si vuelven tras un tiempo ausentes, como si son habituales, serán bienvenid@s.

En cualquier caso, NI SE LES OCURRA PERDÉRSELA.

‘Los Fabelman’: El cine y la vida

A esta firmante – que atraviesa una fase más bien dispersa, de reflejos lentos y poco proclive a la concentración, aunque parezca paradójico, algo que se esfuerza en controlar especialmente en estas entradas – le desconcertó mucho el tratamiento de esta película tan personal y autobiográfica de Steven Spielberg, cosecha del 46, y ya un clásico viviente cuya filmografía no hace falta recordar. O al menos, de autoficción. Pero, al investigar como suele para contextualizar la crítica y documentarla, se encontró, para su sorpresa, que este relato fílmico corresponde exactamente a los hechos que tuvieron lugar durante la infancia, adolescencia y primera juventud del realizador.

Aunque los nombres y algunas circunstancias, pocas, se hayan ficcionado la historia ocurrió tal cual la describe la sinopsis, pero aquí se ocultarán algunos detalles para no hacer spoiler. Comentar también que Leah Posner – nombre de soltera de la madre del cineasta, que fue pianista y restauradora y que murió en 2017, cuando contaba con 97 años – luce en sus fotos de juventud tan rabiosamente rubia y con el mismo look con el que la interpreta una memorable Michelle Williams, justamente nominada al Oscar como Mejor Actriz Protagonista por este trabajo. Sólo que Leah tenía una imponente nariz judía al contrario que la intérprete…

Por su parte, Arnold Spielberg fue un ingeniero informático que, junto a su inseparable amigo y colega Bernie, completamente integrado en su familia, formó un tándem solvente, cómplice y bien avenido hasta que… Y hasta aquí puede leerse. Tanto Paul Dano como Seth Rogen los interpretan con solvencia.

Esta firmante ha leído también que el cineasta se ha tomado su tiempo para contar esta historia hasta ahora. Años y décadas, siendo ya un septuagenario avanzado. Ha leído también que tuvo que parar el rodaje varias veces, aún estando muy apoyado por su amigo y coguionista Tony Kushner que fue quien le animó a filmarla cuando la conoció, porque las emociones le desbordaban.

Y por esto, habiendo leído todo esto, quien esto firma ha repensado ‘Los Fabelman’ en otros términos. Ha valorado su tratamiento, ha valorado su entusiasmo, la pasión por el cine que desprende y también por la vida en un núcleo tan compacto y aparentemente bien avenido como el que formaba con su progenitora, su progenitor, sus tres hermanas y el citado Bernie.

Ha valorado una puesta en escena tan estilizada, más lúdica, idealizada y traviesa, cuando la narración es mostrada a través de los ojos de un niño, al que presta su talento Mateo Zoryon, como más llena de aristas, desengañada y sombría, cuando lo es a través de los del adolescente, un excelente, todo un descubrimiento, Gabriel Labelle.

Pero, en cuanto a sus temas esenciales están ahí: la infancia, especialmente tratándose de niños varones, el judaísmo en ejercicio y como denuncia, el protagonista sufre un bullyng antisemita generalizado, la familia… Aunque nunca de forma tan íntima y personal como aquí. Y eso es muy de agradecer.

Como lo es que lo haga con modestia y humildad, sin pretensiones autorales o narcisismos al uso, más aún revelando su encuentro, siendo un quinceañero, nada menos que con John Ford… Algo que ya había contado, pero no por ello se vive la escena con mayor admiración y humor.

Como lo que es que no condene a ningún personaje, que los mime y que les aporte complejidad. Como lo es que convierta en un espectáculo el admirado pasmo del niño al ver cierta escena de ‘El mayor espectáculo del mundo’ y la intente recrear año tras año en su casa. Como lo es que se gane el respeto de sus condíscipulos matones con su trabajo tras la cámara y el dolor que le supone el descubrimiento inesperado que hace trizas su microcosmos más íntimo. Como lo es…

Producción estadounidense, fechada en 2022, de 151 minutos de metraje. Ya hemos hecho alusión a su escritura a dos manos y a su reparto. La excelente fotografía es debida al talento de uno de sus habituales, Janusz Kaminski y la banda sonora de otro de sus fieles, el maestro John Williams. Entre sus múltiples reconocimientos, están los de Mejor Película, Premio del Público, en el Festival de Toronto, 2 Globos de Oro a la Mejor Película Drama y Dirección y 7 nominaciones a los Oscar, entre las cuales Mejor Película, Dirección y Guion Original.

Deberían verla.

‘En cartelera’, desde Viva Sevilla a Sevilla Cinéfila: Se estrena la última de las películas propuestas para debatir en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez.

Así es, ‘The quiet girl’, de Colm Bairéad, se estrena hoy y es una de las elegidas para debatir el miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez, en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra. VÉANLA CUANTO ANTES.

Advertirles también, al margen ya de la tertulia, que otra de las estrenadas hoy sólo tiene una única sesión en el Avenida, a las 17 horas. Se trata de ‘Asuntos familiares’, de Arnaud Desplechin. Si les apetece verla, deberían hacerlo cuanto antes también.

Y ahora sí, aquí tienen ya el enlace a la colaboración de esta firmante en Viva Sevilla:

https://vivasevilla.es/sevilla/1206108/the-quiet-girl-el-estreno-recomendado-del-viernes/

Pues ya lo saben. Consulten horarios y sesiones y vayan al cine. #CineEnLasSalas #YoVoyAlCine

‘Ellas hablan’: Hijas de un Dios patriarcal

Antecedentes:

A propósito de los hechos reales que se ficcionan en esta película – basada en el libro homónimo, que esta firmante no ha leído, de la actriz y escritora canadiense Miriam Toews, de ascendencia menonita, que asi se denomina a una rama, o secta, de la religión protestante que preconiza una interpretación de la Biblia que se traduce en una vida simple y muy apegada a la tierra, pudiendo ser más cerradas sus comunidades o más aperturistas – una nota de la obra citada los documenta con estas palabras:

«Entre 2005 y 2009, en una remota colonia menonita de Bolivia… muchas mujeres y niñas se levantaban por la mañana doloridas, con sensación de modorra, amoratadas y sangrando, como consecuencia de haber sido agredidas por la noche. Estas agresiones fueron atribuídas a fantasmas y a demonios… a que Dios o Satán las estaban castigando por sus pecados e incluso fueron acusadas de mentir para encubrir adulterios o llamar la atención. Con el tiempo se descubrió que ocho hombres habían administrado anestésicos para animales a sus víctimas, 150 de todas las edades, niñas incluídas, para dejarlas inconscientes y así poder violarlas»

Sinopsis y enfoque narrativo:

‘Ellas hablan’ imagina a ocho de estas mujeres, de dos clanes diferentes, celebrando dos asambleas clandestinas en el granero, para decidir qué hacer tras ser víctimas de estas feroces violencias y antes de que sus verdugos, tíos, hermanos, sobrinos…, que han sido detenidos, vuelvan a casa en libertad bajo fianza. Ellas toman la palabra para decidir qué hacer si perdonar, si olvidar, si vengarse o si marcharse.

Toman la palabra contrastando sus opiniones, revelando sus temores, sus dependencias, sus miedos y también sus culpas. Indignadas, rabiosas, llenas de humor, brutalmente maltratada una de ellas y sus niñ@s, pero, pese a todo, compasivas. Toman la palabra intentando conciliar sus deseos de justicia con los del perdón y, sobre todo, con los de preservar la fe en un Dios, el de su comunidad cerrada y ferozmente misógina, patriarcal.

Toman la palabra para proteger a sus hijas tan pequeñas de nuevos ataques, para preservar a la hija que aún no ha nacido – fruto de la agresión e hilo conductor del relato y su voz en off y, pese a ello, muy querida – de un ambiente tan dañino y peligroso. Toman la palabra incluso sabiendo las ancianas que no tendrán futuro, ni siquiera si y cuando se marchen.

Toman la palabra para tener el valor, del que hacen gala, de desarraigarse de su único hogar y – analfabetas e ignorantes del mundo como se las ha condenado a ser, pero inteligentes y lúcidas – emprender un camino de no retorno sin mirar atrás. Toman la palabra para decidir si, en caso de irse, llevarán a sus hijos varones consigo, puesto que algunos ya están infectados por la violencia de sus pares adultos.

Toman la palabra, con un varón aliado y enamorado de una de ellas, documentando a modo de actas estas reuniones. Un varón aliado, profesor, que las apoya incondicionalmente, que las enseña a orientarse y que inculcaré en la educación de los niños los valores de respeto a sus compañeras.

Toman la palabra mientras vemos imágenes de la vida en la comunidad y de los distintos destinos y modos de vida reservados a hombres y mujeres, a los niños y las niñas, a los adolescentes de uno y de otro sexo. Toman la palabra…

La actriz, guionista, cantante y realizadora canadiense Sarah Polley – cosecha del 79, a la que recordamos como protagonista de las películas de Isabel Coixet ‘Mi vida sin mí’ (2003) y ‘La vida secreta de las palabras’ (2005) y que tiene, incluyendo a este que nos ocupa, cuatro largometrajes en su haber tan estimables como ‘Lejos de ella’ (2006) o el documental ‘Stories we tell’ (2012) – responsable también de la escritura, junto a la autora del libro citada, tiene una mirada compasiva, solidaria, lúcida, compleja y llena de amor y humor sobre esta historia y sus protagonistas.

Una mirada profundamente feminista que, sin embargo, no hace sangre, ni subraya apenas el horror sufrido por ellas. Como en el libro que adapta, apenas si entrevemos los hechos terribles. Apenas si nos son mostrados fogonazos.

Porque lo que importa aquí son las voces de las que nunca las han tenido. Porque lo que importa aquí es lo que ellas hablan y lo que tales debates y discusiones, también cánticos religiosos, muestran sobre sus vidas, interrelaciones y personalidades algunas muy dispares, incluso antagónicas, pero siempre empáticas.

Así que nos hace verlas, oirlas, sentirlas, coincidir o discrepar con sus reacciones y puntos de vista, en una puesta en escena, dentro de la que se intercalan algunos flashbacks, sobria, contenida, serena, contemplativa y casi en tiempo real. Mirada que se transforma, cuando la decisión esta tomada, en un vibrante, desasosegante, hermoso y emotivo tramo final.

Producción estadounidense, fechada en 2022, de 104 minutos de metraje. La fotografía con excelencia Luc Montpellier y su extraordinaria banda sonora se debe al maestro Hildur Guonadottir. La interpretan con talento y entrega, un magnífico reparto coral, Rooney Mara, Claire Foy, Judith Ivey, Sheila McCarthy o Ben Whishaw. Frances McDormand, una de las productoras, aparece en un papel episódico.

La preceden incontables reconocimientos, todos le son debidos, y dos candidaturas a los Oscar: Mejor Película y Mejor Guion Adaptado.

Escrito queda. No deberían perdérsela.

En cartelera desde Viva Sevilla a Sevilla Cinéfila: Ya huele a Oscar y se estrena otra de las películas a debate en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez

Así es, ya huele a Oscar y la cartelera sevillana lo refleja también en su oferta de estrenos. Una oferta de estrenos, la de este viernes, de la que hemos destacado dos películas y una de ellas, ‘El triángulo de la tristeza’, de Ruben Östlund, es una de las elegidas para debatir en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 1 de marzo, a las 19l.30, en Casa del Libro Velázquez. El enlace a su crítica en el blog es:

‘El triángulo de la tristeza’: El capitalismo siempre a flote

En cuanto a la otra destacada, pero no elegida para la tertulia, ‘Ellas hablan’, de Sarah Polley, esta firmante acaba de verla y muy pronto tendrán su crítica en el blog.

El enlace de la colaboración citada en Viva Sevilla de quien esto firma es:

https://vivasevilla.es/sevilla/1202160/los-oscar-llegan-a-las-carteleras-sevillanas/

Pues ya lo saben. Consulten horarios y sesiones y vayan al cine. #CineEnLasSalas #YoVoyAlCine

‘El triángulo de la tristeza’: El capitalismo siempre a flote

Prólogo y preestreno:

Esta firmante tuvo ocasión de visionar esta película – la última y muy premiada propuesta del productor, editor, director de fotografía, guionista y realizador sueco Ruben Östlund, cosecha del 74, que completa la celebrada trilogía de su director sobre la ridiculez masculina, o de su incomodidad ante los nuevos roles a los que deben ajustarse, que inició con ‘Fuerza mayor’ (2014) Premio del Jurado de Un Certain Regard en Cannes y Giraldillo de Oro en el SEFF, siguió con ‘The Square’ (2017), Palma de Oro en Cannes y Goya a la Mejor Película Europea y con esta que nos ocupa, ‘El triángulo de la tristeza’ (2022), también ganadora del máximo galardón en la pasada edición de ese Certamen, lo que le ha convertido en miembro de un exclusivo club de cineastas varones que la han ganado dos veces y en un profesional extraordinariamente galardonado, para contar con sólo seis largometrajes en su haber – en un preestreno el jueves pasado en el cine Avenida, ya que no pudo hacerlo en el SEFF por no haber entradas suficientes para las personas acreditadas.

Una sesión especial sin la presentación prevista, por surgir circunstancias imponderables. Una sesión especial en la que, como un guiño que si han visto la película, o se proponen verla, lo comprenderán, se nos ofreció a cada un@ de l@s espectadores-as una bolsita de palitos salados… Una sesión especial que luego tuvo un coloquio en streaming con el director, desde Los Ángeles, presentado por su colega español Nacho Vigalondo.

Pero de este tema se dejará constancia luego. Porque lo que sigue será articular las impresiones críticas de esta firmante a través, o eso pretende si no le falla la memoria, de los mismos cuatro epígrafes en los que está dividida ‘El triángulo de la tristeza’, cuyo título, pese a sus evocaciones poéticas, alude, literalmente, a las arrugas que se forman en el entrecejo, así llamadas.

Primera parte: Carl y Yaya

Antes que nada, esta firmante va a rendir un tributo a la modelo y actriz Charlbi Dean, que interpreta aquí a la también modelo e influencer Yaya, quien falleció repentinamente en septiembre del año pasado en Nueva York a los 32 años, a causa de una sepsis bacteriana provocada por la extirpación de su bazo en un gravísimo accidente sufrido en 2009. Comenzaba una carrera como intérprete, tenía la vida y el futuro por delante… Una tragedia. Al menos, tuvo ocasión de celebrar la Palma de Oro de esta película en Cannes.

Una vez escrito esto, comentar también que probablemente sea, a su parecer, una de los mejores capítulos de este relato fílmico. Porque aquí sí se hace gala de una ironía más fina y resultan corrosivos, en la Semana de la Moda, tanto el casting como el divertimento entre las expresiones made in Balenciaga y H&M o las ruindades de Carl, que no serán las únicas y luego habrá más sorpresas…, durante la cena con Yaya acerca de quien debería pagar la cuenta.

Segunda parte: El yate

O de cómo ella y él, este es uno de los hilos conductores del relato, tras el evento citado, son invitados a un crucero de lujo en el que toda la tripulación está al servicio de un pasaje rico y privilegiado, para lo que se preparan con una motivación de grupo antes de que lleguen. Tod@s salvo el capitán -«marxista, no comunista» – que no sale de su camarote hasta que se ve obligado por ser el anfitrión de su cena y que en ella hace un duelo de citas de autores con ideologías tan opuestas como ellos, con el empresario ruso. En este capítulo se alternan tanto el humor más corrosivo en su primera parte , como la escatología más burda y de brocha gorda, pese a lo cual logra arrancarte algunas carcajadas combinadas con el asco en la segunda. Hasta que…

Tercera y cuarta parte: El naufragio y la isla

La verdad es que, pese a la espectacularidad con la que está rodado el naufragio, que da lugar a las reacciones fisiológicas a las que se ha aludido anteriormente, esta son las partes más flojas y más desaprovechadas de este relato. Porque, salvo el giro final – tan inesperado y abierto, que no se desvelará – a esta inversión de los roles de poder, de los roles de clase, apenas si se le ha sacado partido – salvo por el talento de Dolly de Leon, justamente reconocido y los de Zlatko Buric y Vicki Berlin – y porque la ausencia en ella de un magnífico Woody Harrelson se hace notar bastante.

Y sí resulta muy banal para esta firmante, se reitera en ello, esta estancia forzosa en un espacio desconocido cuando podría haber sido demoledora por el cambio radical en las relaciones de poder y de clase, por mor de la supervivencia. No lo es, en absoluto y podía haber dado mucho juego.

A ese respecto en el debate en streaming, al que quien esto firma sólo se quedó muy al principio por la hora, Nacho Vigalondo le preguntó al realizador por las concomitancias con Titanic, pero Ruben Östlund las negó por el hecho de que en la película de Cameron los ricos son odiosos y él piensa que esto es esquemático porque muchos lo son… sólo que no pagan impuestos. También estimó imposible una síntesis de ambas.

Coproducción entre Suecia, Francia, Reino Unido y Alemania, fechada en 2022, de 149 minutos de metraje. Su guion, ya se ha escrito, se debe a su responsable. La fotografía con excelencia Fredrik Wenzel. De los más destacado de un reparto coral, también se ha escrito. Entre sus múltiples reconocimientos destacan la ya citada Palma de Oro en Cannes y tres nominaciones a los Oscar: Mejor Pelicula, Mejor Dirección y Mejor Guion Original.

Es una de las elegidas para comentar en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez, que no te cuenten la tertulia, tienes que vivirla. VÉANLA CUANTO ANTES. Porque aunque a esta firmante le haya parecido – lo ha ido escribiendo – sobrevalorada, una sátira pocas veces fina y muchas burda y de brocha gorda y desaprovechada en sus enormes posibilidades, es evidente que hay que verla. Tiene mucho debate…

Escrito queda.


Unos Goya 2023 de sabor agridulce: Muy promujeres y muy antianimales

Esta firmante debe confesar que una broma – a propósito de la fotografía que se hizo con uno de los «cabezones» que pueblan Sevilla, sede de la celebración de la llamada la Gran Fiesta del Cine Español – hizo que alguien muy querido la malentendiera y la enviara a la Academia, que así lo propuso, para tener una invitación a la Gala. Afortunadamente, imperó el buen sentido y quien esto firma se queda sin ella. Es por esto que, al no haber conflicto alguno de intereses, se permite escribir esta entrada la víspera de la entrega de tan preciados y prestigiosos galardones.

La dulzura corresponde a la abultada nómina de nominadas tanto en las categorías principales, como en otras igualmente importantes que no suelen tenerlas presentes. La feminista que esto firma lo aplaude sin reservas. Ya era hora de que se reconociera a mujeres dotadas de talento y que lo tienen mucho más díficil y duro que los hombres en la industria del cine. Esta firmante ha hecho siempre suyos los eslóganes de la Asociación Andaluza de Mujeres de los Medios Audiovisuales, AAMMA: #CineDeYConMujeres #SinMujeresNoHayCine. Sí pero…

… Pero este año, y aquí se deja constancia también de la amargura, las nominadas tienen un fuerte sesgo especista. Aún más contienen, directa o indirectamente, maltrato animal. Un maltrato animal reflejado en sus historia e imágenes directo e indirecto, complaciente, despojado de compasión alguna hacia seres sintientes, e incluso utilizado como gag. Caso sangrante el de ‘Alcarrás’, cuyo enlace a la crítica de este blog es:

https://sevillacinefila.com/2022/05/01/alcarras-la-tierra-de-todas-las-criaturas-grandes-y-pequeñas-humanas-y-no-humanas/

Pero también, en mucha menor, pero relevante, medida, en ‘Cinco lobitos’, cuyo enlace es¨:

‘Cinco lobitos’ y el desprecio a un animal

E igualmente en ‘As bestas’, cuya referencia pueden encontrar en:

Hojas de Ruta del SEFF 2022: Sección EFA

Con la que está cayendo en este país atroz con las especies no humanas, en el que la tauromaquia y la caza son intocables. La primera integrada en el Ministerio de Cultura, una de cuyas ganaderías ha sido premiada por este Departamento, y la segunda con el gobierno cómplice del lobby de quienes practican esa actividad criminal excluyendo a los perros de caza – #MismosPerrosMismaLey, como se clama en redes y se ha clamado en las calles del país, en manifestaciones multitudinarias – maltratados por pasiva y por activa y finalmente, asesinados – de la llamada Ley de Protección Animal…

… Con la que está cayendo en este país en el que las condenas por casos lacerantes de sangrantes torturas y escalofriantes asesinatos como los del perro Timple, la perra Alma y el perrito Cooper – #JusticiaParaTimple, #JusticiaParaAlma, #JusticiaParaCooper #JusticiaYDerechosYaParaLosAnimales – son ridículas y dejan a los verdugos y criminales en libertad, en la impunidad a todos los efectos. No sólo eso, sino en el caso del miserable que molió a golpes y acabó brutalmente con la vida de Cooper le ha acogido, y avalado, un ministerio que le mantiene en plantilla o le ha jubilado ya a cargo de nuestros impuestos. #ConMisImPuestosNo

Por todo ello, y mucho más, ya sería hora de que nuestra cinematografía denunciara tales infamias o, al menos, apostara en las películas por el respeto, la sensibilidad y la empatía hacia esas criaturas sintientes, ciudadan@s como nosotr@s, compañer@s de planeta y que merecen vivir y ser respetadas.

Todo lo demás es barbarie.

Escrito queda.

Post scriptum:

Por si acaso cupiera alguna duda, el ganador reivindicó como «ecologista» la llamada fiesta de A Rapa das Bestas donde caballos libres, tildados como salvajes, son reducidos cruelmente por los mozos de turno, aterrándoles y agrediéndoles con prácticas que les provocan daños físicos y emocionales. Otra barbarie más contra estos nobles animales, denunciada por varios colectivos y asociaciones animalistas.

‘En cartelera’, desde Viva Sevilla a Sevilla Cinéfila: La última y premiada propuesta de Spielberg

Este segundo viernes de febrero la oferta de estrenos nos trae, entre otras dos películas a tener en cuenta, la última, con excelentes críticas, y muy premiada – dos Globos de Oro y siete nominaciones a los Oscar – propuesta de Steven Spielberg, un relato semiautobiográfico lleno de amor al cine. Aquí tienen el enlace:

https://vivasevilla.es/sevilla/1194881/la-niña-de-la-comunion-frente-a-los-fabelman/

Pues ya lo saben consulten salas, horarios y sesiones y vayan al cine. #CineEnLasSalas #YoVoyAlCine

¡¡¡MUY IMPORTANTE!!!: Preestreno de ‘El triángulo de la tristeza’, de Ruben Östlund, una de las elegidas para debatir en la tertulia del miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez.

Mañana jueves, 9 de febrero, a las 19.15 en el Avenida y a las 19.30 en Nervión y en cines de varias ciudades españolas, consulten horarios por si acaso pero están confirmados, se preestrena ‘El triángulo de la tristeza’, de Ruben Östlund, una de las elegidas para debatir en la próxima sesión de nuestra tertulia de cine Luis Casal Pereyra del miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez.

Dado que su estreno oficial tendrá lugar el viernes de la semana que viene, 17 de febrero, es una excelente oportunidad para adelantar su visión de cara a la actividad o de verla antes, en cualquier caso. Porque contará con el atractivo especial de que habrá un coloquio posterior con su realizador, acompañado de un crítico de cine, vía streaming. Algo muy estimulante y enriquecedor para quienes, como esta firmante, no pudimos verla en el SEFF por estar las entradas agotadas y no haber una previsión suficiente de ellas para l@s acreditad@s.

Se trata de una coproducción entre Suecia, Francia, Reino Unido y Alemania, fechada en 2022, de 149 minutos de metraje, escrita también por el propio director. Su historia remite a un crucero de lujo donde, tras la Semana de la Moda, son invitados una pareja de modelos e influencers junto a un grupo de gente rica y privilegiada. Mientras la tripulación se desvive en atenciones hacia ellos, el capitán permanece recluído en su camarote pese a la inminencia de la cena de gala. Entonces, un giro inesperado trastocará el equilibrio de poder…

Entre la comedia, el drama, la comedia dramática y la comedia negra, llega paurecedida de incontables reconocimientos como la Palma de Oro en Cannes y tres nominaciones a los Oscar como Mejor Película, Dirección y Guion Original, sus referencias críticas son espléndidas. Aquí tienen algunos extractos de ellas publicados en la imprescindible página de referencia FilmAffinity:

«Una sátira mordaz sobre el culto al dinero y al insostenible sistema de clases del mundo actual… la película está plagada de hallazgos» Elsa Fernández-Santos, El País; «Una propuesta tan gozosamente delirante como triste… una fábula del capitalismo que se convierte en la mejor representación del caos imaginable» Luis Martínez, El Mundo; «Una salvaje y divertidísima sátira sobre los influencers y la lucha de clases…» Pepa Blanes, Cadena SER.

Pues ya lo saben. Escrito queda.

‘Almas en pena de Inisherin’: «Tristes guerras…

… si no es amor la empresa», como escribiera Miguel Hernández, en un pequeño y hermoso poema a modo de canción, que se adaptó como tal, con el que esta firmante ha querido titular esta crítica. Porque encaja con la historia, a su parecer, y porque estuvo a punto – por amor a los animales y por malinterpretar la presencia de estos vía trailer – de no ver esta película y de no proponerla para su elección de cara a la tertulia de marzo. Pero imperó su responsabilidad, fue una de las elegidas y tanto ella misma, como la actividad, como l@s tertulian@, salimos ganando.

Porque estamos aquí ante una obra mayor que nos interpela sin pretensiones, ni petulancias, ni subrayados, ni ampulosidades. Porque estamos aquí ante una mirada tan socarrona y divertida, como trágica y conmovedora, a la condición masculina, marca de la casa del realizador.

Porque la historia de dos amigos de siempre que viven en una isla remota de la costa oeste irlandesa en los años 20 bajo el trasfondo de una Guerra Civil lejana pero muy presente, cuya relación es unilateralmente interrumpida por uno de ellos – violinista y compositor, hombre cultivado – ante el pasmo y la incredulidad del otro – un hombre bueno, limitado y aburrido – que ni lo comprende, ni lo acepta…

… va más allá de la anécdota, de los clichés, o del costumbrismo siempre acechantes cuando se trata, como en este caso, de una comunidad pequeña y cerrada. Va, en la personal e intransferible opinión de esta firmante que puede ser compartida o no, sobre el derecho al silencio, cuando tienes música en tu cabeza, y una cháchara insustancial te hace perder un tiempo precioso que no sabes cuanto durará aunque no estés enfermo.

Va también sobre la decisión radical de quien, aún consciente del daño que causa, es capaz de sobrepasar todos los límites para conseguir ser respetado en su opción. Va sobre los lazos y los compromisos forzosos, sobre los usos y costumbres que, una vez trastocados, tienen un indeseable y trágico efecto dominó.

Va sobre un hombre elemental para el que sus rutinas y afectos – entre ellos, por su preciosa pony – son imprescindibles. Un hombre que quiere comprender y que no se resigna. Un hombre que saca lo mejor y lo peor de sí mismo, revelando una personalidad bastante más compleja que la que exhibía antes del conflicto.

Va sobre un presunto guardián de la ley que es un miserable maltratador y el villano de la función, con la complicidad del entorno. Va sobre un entorno tan hermoso como asfixiante. Va sobre una mujer culta e inteligente, que vive volcada en su hermano más torpe, pero que… Va sobre otra que es capaz de «ver» el futuro. Va sobre estas almas en pena, con el humor, el dolor y la contienda fratricida tan lejos y tan cerca, que condiciona también sus reacciones y sentimientos.

Va sobre la incomunicación, sobre las crisis masculinas, sobre unos hábitos que encorsetan tanto como tranquilizan, va sobre la soledad más profunda y sobre las dependencias afectivas. Va también, aunque a esta firmante no le guste que se utilicen animales en los rodajes, sobre el amor grande e intenso a esas criaturas no humanas y todo ello le ha resultado muy conmovedor a esta firmante. Va… de tantos y tan relevantes temas que debatiremos en la próxima sesión de nuestra tertulia del miércoles, 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez

Coproducción entre Reino Unido, Irlanda y Estados Unidos, fechada en 2022, de 114 minutos de metraje. La escribe y la dirige el dramaturgo y cineasta británico Martin McDonagh, cosecha del 70, en cuya filmografía se cuentan las notables ‘Escondidos en Brujas’ (2008) y ‘Tres anuncios en las afueras’ (2017). La fotografía muy bien Ben Davis y la banda sonora la firma el maestro Carter Burwell.

Su reparto, en estado de gracia, está encabezados por unos eminentes, y habituales de su director, Colin Farrell, que se hizo con la Copa Volpi en Venecia al Mejor Actor y que es uno de los más serios candidatos a alzarse con la estatuílla dorada y Brendan Gleeson, que está nominado igualmente al Mejor Actor de Reparto. Sin olvidar a la excelente Kerry Condon. Entre los reconocimientos, todos le son debidos, que la preceden están 3 Globos de Oro y 9 nominaciones a los Oscar.

Entre el drama, la comedia y la comedia negra, es una, se reitera, obra mayor muy divertida, brutal, lúcida, trágica, pasional e intensamente emotiva que nadie debería perderse, vayan a la tertulia de cine Luis Casal Pereyra o no. Pero si lo hacen, saldrán ganando pues tendrán ocasión de comentarla, contrastarla y enriquecerse con las múltiples miradas y aportaciones que se dan en ella. El 1 de marzo, a las 19.30, en Casa del Libro Velázquez. Que no te la cuenten, tienes que vivirla.

VÉANLA CUANTO ANTES, NO SE LA PIERDAN.

Escrito queda.