Archivo diario: agosto 8, 2016

‘Mi vida a los 60’: Cronologías

Coinciden estos días bochornosos en nuestras carteleras varias propuestas cinematográficas dirigidas por mujeres. Ya indicamos en otra entrada que esta estación es propicia para las realizadoras. Para lo mejor, porque podemos conocer sus filmografías y para lo peor, porque es temporada baja y no suelen durar mucho en las salas.

‘Mi vida a los sesenta’ es una producción alemana fechada en el 2014, de 98 minutos de metraje. Ópera prima de Sigrid Hoerner , quien la presentó el pasado junio en el 18 Festival de Cine Alemán de Madrid. El guión es de Jane Ainscough. La fotografía la firma Matthias Fleischer y la música, Max Knoth.

Narra, en clave de comedia, las peripecias de Louise, una brillante, pero impopular en su trabajo, física molecular a quien su jefe obliga a jubilarse prematuramente, apenas entrada en la sesentena, y se plantea hacer algo transgresor que ha dejado aparcado en su vida. Paralelamente, un galerista llamado Frans, contemporáneo suyo, intenta aferrarse a la juventud por todos los medios. Sus caminos se cruzan y…

Su realizadora ha comentado que en ella «se muestra el ridículo que muchas veces rozan los hombres y mujeres mayores que se niegan a envejecer, pero que ni quiere juzgar, ni invitar a nadie a hacerlo» También que «es cierto que muestra clichés, pero es que a veces la realidad se acerca cada vez más a la caricatura; si miro a mi alrededor, son muchas las personas, sobre todo hombres, que se comportan sin ningún pudor»

Y que «no es una reivindicación feminista, pese a las dificultades que ha tenido para hacerla, pero que la ha rodado para explicar que no está dispuesta a verse limitada si quiere vivir con los mismos derechos que un hombre» Escrito queda y toda una declaración de principios que puede aplicarse a esta reseña.

La película, que acusa en su factura la inexperiencia tras la cámara de la cineasta y el exiguo presupuesto del que dispuso, es honesta y consecuente al abordar el duro proceso del envejecimiento en una sociedad que rinde culto a la eterna juventud. Hace una sátira de tal crisis en sus protagonistas, con una mirada crítica hacia ambos. Pero incide sabiamente en la paradoja de que resulte mucho más transgresora la pretensión de ella, siendo algo disparatada, de que el hecho de él tenga una amante veinteañera…

Divertida y ácida, pese a su humor germano, es mejor cuando se plantea los temas más en serio. Cierto que contiene algunos clichés, pero lo es también que rompe esquemas. La científica es ella; el galerista, él. La irresistible madre de ella y el no menos encantador y comprensivo hijo de él. Sus interrelaciones mutuas y el proceso de su trato, tan cómplice, desinhibido  e inteligente. El reparto cumple muy bien, con especial mención para la estupenda Iris Berben.

En resumen, una película irregular e imperfecta, pero nada desdeñable. Adulta y promujeres. Deberían verla.