La profusión de miradas cinematográficas de mujeres en verano es – quien esto firma ya lo ha señalado varias veces… – un arma de doble filo. Por una parte, tenemos ocasión de ver sus propuestas y por otra, es temporada baja y las mantienen muy poco tiempo en cartelera o en pocas sesiones a horarios difíciles. Esto le ha ocurrido a la película que nos ocupa, que va a estar solo una semana en exhibición, pese a sus valores que ahora se destacarán.
Producción francesa de 98 minutos de metraje. La dirige la actriz – es una de las protagonistas de esta película coral – guionista – firma su escritura, junto a su ex compañero y colega Jean-Pierre Bacri – cantante – algunas de las muy estimulantes composiciones musicales que suenan en la banda sonora son suyas – y realizadora – de origen judío tunecino, cosecha del 64, con una filmografía muy a tener en cuenta en la que destacar títulos como ‘El gusto de los otros’ (2000) o ‘Como una imagen’ (2004), muy premiados ambos- Agnès Jaoui. Y la fotografía muy bien Yves Angelo.
Su título original es Plaza pública y a fe que le encaja como un guante. Literal y metafóricamente. Remite a un grupo de personas que se reúnen en torno a una fiesta de inauguración de una mansión rural a pocos kms de París.
La anfitriona es la dueña de la casa y productora de un programa de televisión otrora estrella y ahora en decadencia, que presenta su ex cuñado, otrora estrella y ahora en decadencia, quien espera a su joven amante. Su hermana, y ex esposa del último, es una mujer solidaria que pretende incluir en el espacio contenidos éticos y la entrevista a una mujer afgana. La hija de ambos, escritora, ha publicado una novela autobiográfica en la que salda algunas cuentas familiares y…
… Y además están un rapero emergente y su corte, el chófer del presentador, el ayudante de la citada profesional que les ha reunido allí, personal del servicio, entre l@s cuales una camarera con pasión por selfies y famos@s y los desesperados vecinos, los verdaderamente rurales, que sufren el ruido y la invasión de esta celebración multitudinaria hasta llegar a un punto límite.
Con estos mimbres, Agnes Jaoui hace una demoledora radiografía, tan feroz como irresistiblemente divertida, de una fauna que prolifera en determinados estamentos sociales. De una fauna que ella conoce muy bien. De una fauna egocéntrica, narcisista, machista, paternalista, clasista y condescendiente. De una fauna con egos extremadamente vulnerables y susceptibles, pero brutalmente carentes de empatía.
De una fauna a la que va conduciendo a inesperadas conclusiones, a inesperados encuentros y desencuentros, a inesperadas caídas y resurrecciones, a inesperadas decepciones y a inesperadas afinidades. Todo ello con la vanidad, las ideas de izquierdas superadas por la praxis cínica del éxito o el poder, con las servidumbres del paso del tiempo, con… Con la complicidad de un reparto en estado de gracia, sobre todo en lo que se refiere a los ya citados Jaoui y Bacri y a Léa Drucker, en un registro radicalmente distinto al de su personaje en ‘Custodia compartida’.
Aparentemente ligera, pero con una gran carga de profundidad. Sutil, brillantemente dialogada, con un irónico y cínico sentido del humor, elegante, corrosiva, cáustica y muy inteligente, en Sevilla solo podrán verla hoy, SOLO HOY, en versión original subtitulada en el Avenida a las 20.15 y a las 22.30 y doblada en el Nervión a las 18.00, 22.50 y 23.15.
Háganlo. Véanla.