La abajo firmante había esperado y descartado, tras meses desde su estreno ‘oficial’ en el país, ver esta película en una ciudad tan ingrata para el cine más alternativo y minoritario, como lo es Sevilla. La abajo firmante había visionado y compartido en varias ocasiones los trailers, en versión original subtitulada, de esta cinta británica, de Andrew Haigh, multipremiada y fechada en 2011. La abajo firmante temía que sus expectativas sobre las bondades del filme resultaran defraudadas tras su visión. La abajo firmante, felizmente, se equivocó en todo.
Porque ‘Weekend’ es mucho más de lo que promete, siendo tantas sus sugerencias… Porque la historia de dos extraños en la noche que se encuentran en un club de ambiente, que se sienten atraídos, que practican sexo y cuya relación, contra todo pronóstico, no termina ahí. Porque este intenso y apasionante breve encuentro contiene muchas más lecturas que las meramente románticas. Porque es ferozmente crítica con las convenciones sociales y heterosexistas. Porque sabe mostrar el intercambio de erotismo, alcohol, drogas y excesos varios de los protagonistas pero, sobre todo, sus personalidades más cercanas.
Porque deja traslucir las diferentes posiciones de dos personajes tan distintos en sus historias, familias, formación e intereses y, sin embargo, tan próximos. Porque estos dos hombres dialogan, coinciden, discrepan y teorizan sobre el amor, las relaciones, el compromiso, la sociedad que les rodea, el arte, la felicidad y, desde luego, sobre la opción homosexual en un entorno tan homófobo. Tan cruda como sutilmente homófobo, y muy bien retratado. Porque revela el nacimiento de una intimidad afectiva tan inesperada como perturbadora.
Porque su puesta en escena, tan aparentemente simple, es muy compleja y elaborada. Porque cada plano está al servicio de lo que el director pretende contar. Porque una pequeña casa, una habitación, una ventana, un cristal, un trozo de acera constituyen todo un universo. Porque sabe filmar el fuera de campo. Porque ese final, maldita sea, también lo ha bordado, mal que nos pese. Porque Tom Cullen y Chris New rebosan talento y credibilidad. Porque… ¿qué demonios hacen leyendo estas líneas y no corren a verla?