Archivo diario: noviembre 6, 2022

SEFF 2022, 19 Edición, Sección Oficial, ‘Forever young’: Lo tuyo es puro teatro…

La guionista, cantante, actriz, editora y cineasta italiana afincada en Francia,Valeria Bruni Tedeschi, cosecha del 64, es una excelente intérprete llena de talento y registros, pero como realizadora deja mucho que desear. Al menos, desde el punto de vista de esta firmante. Así, quien esto firma no ha apreciado la desmesura en las formas, unida a la oquedad de contenidos, de títulos como ‘Un castillo en Italia’ (2015) o ‘La casa de verano’ (2018), todos de intensa impronta autobiográfica o de autoficción fílmica.

Una autoficción fílmica, que le ha hecho integrar a miembros de su familia en los repartos – como aquí a su ex pareja y padre de su hija adoptiva, Louis Garrel y a su ex cuñada Lena Garrel – que tiene continuidad en esta su última propuesta. Una autoficción fílmica basada en su experiencia juvenil como estudiante de teatro en la ciudad de Nanterre y en la Ecole des Amandiers, de ahí el mucho más ajustado título original ‘Les Amandiers’, de la que fueron creadores los prestigiosos y desaparecidos Patrice Chereau y Pierre Romans, que aparecen en ‘Forever young’ con los rasgos de Louis Garrel y Micha Lescot respectivamente.

Una autoficción fílmica que la lleva a revisar esas experiencias de iniciación en el teatro y en la vida, con amistades, amores y desamores. Una autoficción fílmica excesiva, histriónica, descontrolada y pródiga en lugares comunes y clichés sobre los oficios teatral y actoral, sobre esos supuestamente maravillosos años y sobre los referentes de los 80 como el sida o las drogas.

Todo ello indigesto, largo y, se reitera, desmesurado. Y, desde luego, autocomplanciente y ombliguista, sin atisbo alguno de contención o de crítica, sino de poses y postureos con personajes sobreactuados cuyas expresiones pasionales de alegría, dolor, amor y desamor están vistas desde la superficialidad y la impostura más descaradas. Se siente, pero así lo ha visto esta firmante quien también supone que algo habrían tenido que objetar Patrice Chereau y Pierre Romans al retrato que se hace de ambos… sin cuestionar la versión de Bruni Tedeschi, que conste.

Coproducción entre Francia e Italia, de 126 minutos de metraje. Su guion, por llamarlo de alguna manera, lo escriben la propia directora, Noémie Lvovsky y Agnés de Sacy. La fotografía muy bien Julien Poupard y en la música suenan, demasiados y muchos de relleno, clásicos de la época. Del reparto, destacar más las presencias que las interpretaciones pues no tienen personajes que componer, sino que están llen@s de tics.

Escrito queda. La pelota en sus tejados.

SEFF, 2022, 19 Edición. Sección Oficial, ‘Close’: Ni contigo, ni sin ti.

El guionista, director de fotografía y cineasta belga Lucas Dhont, cosecha del 91, tiene en su haber reconocimientos tales como la Camera D’Or y el Premio FIPRESCI en Cannes por su ópera prima ‘Girl’ (2018), quien también obtuvo ese mismo año el Premio del Público a la Mejor Película Europea y el Sebastiane.

El SEFF presenta ahora en su Sección Oficial su segundo largometraje y última propuesta, ‘Close’. Se trata de una coproducción entre Bélgica, Francia y los Países Bajos (Holanda), de 105 minutos de metraje, cuya escritura cinematográfica firma también junto a Angelo Tijssens. La sinopsis nos cuenta, fuente FilmAffinity, que «Léo y Rémi, de 13 años, son amigos de toda la vida. Hasta que un suceso impensable los separa. Léo se acerca entonces a Sophie, la madre de Rémi, para tratar de entender»

Ahora que esta firmante acaba de ver la película, decirles que esta sinopsis no tiene nada que ver con la historia que se nos cuenta. Con matices, claro. Efectivamente los dos niños son muy amigos, mantienen una relación afectiva llena de respeto y de ternura, una ternura también física, plena de estima y admiración mutuas.

Son inseparables. Tamto es así que Sophie, la madre de Rémi llama a Léo su «hijo postizo». Duermen juntos, hacen proyectos juntos, se relajan el uno al otro, corren, juegan en escondites secretos, hacen carreras en la bici. Léo anima a Rémi en su concierto de oboe y este hace lo propio en su partido de hockey sobre hielo. Hasta que llegan al colegio y su relación choca: se les interroga, se les cuestiona, hay burlas, acoso… y es Léo quien niega, a todos los efectos, a su amigo – un chico sensible, adorable, frágil y vulnerable – provocando involuntariamente una tragedia irreversible.

A la contra de las excelentes críticas que la preceden, de los Premios que ha obtenido – Gran Premio del Jurado ex aequo en Cannes y el del Público en el Festival de Morelia y los que están por llegar – de las lágrimas y aplausos durante y al final de la proyección… esta firmante se confiesa totalmente decepcionada con ‘Close’ o, por lo menos, hasta el dramático suceso que no se desvelará.

Porque es muy hermoso el retrato que hace de ese vínculo afectivo tan fuerte, tan sensible y muy certeramente amargo la forma que el sexismo, la homofobia y los mandatos patriarcales de género hacen mella en él. Hasta ahí, se repite, todo muy bien. Pero no incide lo suficiente en ello, siendo tan fundamental, y a partir de ahí…

… A partir de ahí, el realizador sí incide, y lo alarga innecesariamente, el doloroso proceso de un duelo que cursa con la culpa y que se pretende evadir con una actividad exhaustiva. Alarga este proceso innecesariamente y, de paso, el metraje. Tomas y más tomas, secuencias y más secuencias, de esfuerzos físicos para paliar el sufrimiento y la ausencia. Tomas y más tomas de actividades familiares agrícolas, de carreras, de broncos partidos de hockey sobre hielo. Tomas y más tomas prescindibles, efectistas y que no suman, sino que restan.

Porque Lucas Dhont nos ha hurtado, sin embargo, en aras de una pretendida contención, el estallido emocional, la catarsis necesaria que llega tarde, apresurada y mal. Dilata en el tiempo la conversación con la madre, dilata en el tiempo la confesión, dilata en el tiempo lo imprescindible y relevante, poco antes de una conclusión también efectista.

Por todo ello, esta firmante, aún reconociéndole los valores citados, va a la contra de lo que será una mayoría entusiasta. Algo que, a no dudarlo, se reflejará en el Palmarés. Por eso se ha escrito que esta firmante va a la contra porque considera ‘Close’ fallida y desaprovechada en toda sus posibilidades narrativas de temáticas, fondo y forma.

Coproducción entre Bélgica, Francia y Países Bajos (Holanda), de 105 minutos de metraje. Su excelente fotografía la firma Frank van den Eeden y su notable banda sonora se debe a Valentin Hadjadj. Del reparto, destacar el magnífico trabajo de los protagonistas: Eden Dambrine y Gustav de Waele, así como de la estupenda Émilie Dequenne.

Pues ya lo saben, esta es muy probablemente una opinión crítica minoritaria. Escrita queda. Véanla y juzguen por sí mism@s.

SEFF 2022, 19 Edición. Sección Oficial, ‘Sonne’: Totum revolutum

La directora kurdo-austríaca Kurdwind Ayub ganó el Premio GWFF a la Mejor Ópera Prima en la Berlinale, para que lo tengan en cuenta. Fue reconocida con tal galardón por esta ‘Sonne’ que nos ocupa. Una historia que, según declaraciones suyas a Teresa Vena en la imprescindible página Cineuropa, quiso contar porque «hace unos años vi a un grupo de chicas en youtube que cantaba canciones en inglés con el hyab puesto y me pareció fascinante, las llamé porque quise hacer un documental sobre ellas pero no me respondieron. Entonces decidí centrarme en mi propio proyecto basado en esa idea»

La idea, la sinopsis, sigue a Yesmin, una adolescente de origen kurdo, y a dos amigas suyas que revolucionan las redes cantando el ‘Losing my religion’ de REM veladas y perreando. A partir de ahí, todo cambiará para la protagonista.

Nada que objetar por parte de esta firmante salvo por el hecho de que, hasta donde la visionó y ya faltaba poco metraje, mezcla en un totum revolutum acrítico, bienintencionado, suave, light y frívolo lo que es una feroz opresión de las mujeres. Una opresión feroz y específica que les cuesta la vida desafiar, aunque sea en una mínima medida, como le ocurrió a Masha Amini en Irán.

Todo lo contrario. Pretenden inspirarlas – según declara una de las protagonistas, cuyo éxito fulgurante las lleva a cantar en bodas, a ser entrevistadas en medio y hasta hacer una gira – a cantar y bailar veladas. Que algo cambie para que nada cambie…

Y aunque la película transcurre en Europa también en nuestro llamado Viejo Continente son sometidas a la mutilación genital y asesinadas por no acatar el mandato teocrático y patriarcal indumentario que, por descontado, sólo les afecta a ellas.

Porque por muy «liberal» que sea el padre – por cierto, el padre y la madre de la realizadora – y más represora, y ortodoxa, la madre es la voluntad del progenitor la que se acata. Y aunque afeen al hijo menor, Kerim, su irresponsabilidad en los estudios y la compañía, él sí que no está obligado a llevar ningún símbolo religioso.

A propósito de este personaje, hay una escena en la que él y los niñatos de sus amigos, que practican el vandalismo urbano, asesinan, o simulan que asesinan, a un animal indefenso que grita y sangra para grabarlo en redes, porque estas están omnipresentes.

En ese punto, la animalista que esto firma abandonó la sala.

Producción austriaca de 87 minutos de metraje. Su guion, como se ha escrito ya, lo escribe la propia directora. La fotografía con solvencia, y los efectos especiales ad hoc, Enzo Bradner. La interpretan con frescura y naturalidad Melina Benli, Law Wallner y Maya Wopienka.

Nada más que decir. Escrito queda. La pelota en sus tejados.